Hasta 354.000 ciudadanos de todo el mundo exigen la liberación de Petr Jasek, que podría ser condenado a muerte en Sudán al ser acusado de espionaje contra el Gobierno. La campaña mundial de peticiones a favor del cooperante cristiano encarcelado la están realizando MasLibres.org y CitizenGO y ha contado con el apoyo de ciudadanos españoles, iberoamericanos, croatas, ingleses, polacos, portugueses, alemanes, entre otros muchos.
Todavía se puede firmar para solicitar la inmediata liberación de Jasek, encarcelado desde diciembre de 2015. MasLibres.org se ha reunido con representantes del Ministerio de Asuntos Exteriores y del Alto Representante de la UE para la Libertad Religiosa para pedirles que intercedan a favor del cooperante. Ambas instituciones, que han recibido las firmas de miles de ciudadanos, se han comprometido a trasladar la situación de Petr Jasek a Bruselas.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraLas condiciones higiénicas de su padre en la cárcel son pésimas, comparte celda con otras 90 presos y no le han dejado comunicarse libremente con él. La salud de Jasek, además, empeora cada día
Los hijos de Petr Jasek, por su parte, han grabado un mensaje de agradecimiento a los miles de firmantes. Creen que el apoyo a su padre, prisionero en Sudán, «es una muestra de que la gente no está contenta» con la situación y esperan que la campaña tenga «efectos positivos».
La familia ha trasladado a MasLibres.org y a CitizenGo que las condiciones higiénicas de su padre en la cárcel son pésimas, comparte celda con otras 90 presos y no le han dejado comunicarse libremente con él. La salud de Jasek, además, empeora cada día.
Siete crímenes castigados con la pena de muerte
El juicio contra el cooperante cristiano, encarcelado desde diciembre de 2015, se inició el pasado 14 de noviembre y continuará en las próximas semanas, en principio cada lunes. Estas sesiones no son el juicio propiamente dicho, sino una revisión de las pruebas. Y hasta que este proceso no termine, no se formularán oficialmente las acusaciones.
Petr Jasek viajó a Darfur (República de Sudán) para ayudar a un joven estudiante cristiano sudanés al que la policía había quemado en 2013 durante una manifestación, para obligarlo a que se convirtiera al islam. El cooperante entregó al joven 5.000 dólares para pagar sus gastos médicos.
Cuatro días después de llegar a Sudán, Jasek fue arrestado en el aeropuerto cuando se disponía a regresar a su país. Le incautaron el móvil, un ordenador portátil y una cámara, con la que había recogido el testimonio de la persecución que sufren los cristianos en este país. El Gobierno de Sudán le acusó de al menos siete crímenes castigados con la pena de muerte, como financiar movimientos rebeldes, realizar labores de espionaje y conspirar contra el Estado.
El portavoz de MasLibres.org ha explicado que «la movilización ciudadana será la que ayude a salvar la vida de Petr Jasek». Por este motivo, Vidal insta «a seguir luchando por la liberación del cooperante checo».