El Ministerio del Interior ha asegurado desconocer el número de policías y guardias civiles que han sufrido delitos de odio por su condición.
Según el ministerio dirigido por Grande-Marlaska, el «sistema estadístico de criminalidad no reconoce como ocupación profesional de la víctima la de Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado».
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraAsí lo señala por escrito el Gobierno socialista en respuesta a una pregunta registrada el pasado mes de julio en el Senado.
La Guardia Civil y la Policía Nacional, indignados
Una respuesta que ha indignado a los miembros de ambas instituciones, aunque tampoco les ha sorprendido debido a la «falta de interés»en la defensa y protección de los efectivos y sus familias, según señalan desde Ok Diario.
En este sentido, el portavoz de la Asociación Española de Guardias Civiles, José Cobo, ha asegurado que desde que Grande-Marlaska se puso al frente del Ministerio del Interior nadie se ha puesto en contacto con ellos.
Asimismo, Cobo ha denunciado que la presión que viven agentes de policía como guardia civil en zonas de Cataluña, País Vasco, Algeciras o las fronteras de Ceuta y Melilla no se ha visto rebajada todavía y ha recordado a los políticos que su responsabilidad es «salvaguardar los derechos de todas las mujeres y hombres integrantes de la guardia civil en los posibles casos de ataque de odio a su legítima condición profesional».
«Alsasua no es un caso aislado», ha señalado el portavoz de la Asociación Española de Guardias Civiles, añadiendo: «Hay numerosos ejemplos de que a policías y a guardias civiles se les desprecia y se les acosa por serlo y no pueden quedar impunes».
Piden ser considerados víctimas de ‘delitos de odio’
Para ello exigen una modificación urgente del Código Penal que incluya a las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado la condición de víctimas de ‘delitos de odio’. “Los agentes quedan amparados por el tipo de atentado contra agente de la autoridad -castigado con penas inferiores, incluso, a las previstas en el caso de otras figuras de autoridad como médicos o docentes- pero no por delito de odio”, ha lamentado Cobo.
De hecho, tras lo ocurrido en Cataluña, el ministerio del Interior habilitó un buzón para denunciar los incidentes que podrían ser considerados delito de odio, ante el acoso sufrido por los agentes de Guardia Civil y Policía desplazados hasta allí.
En concreto, la web ministerial creó un apartado bajo el título ‘Situación en Cataluña: protección de víctimas’, que facilitaba un teléfono y un correo electrónico para poder denunciar. Sin embargo, en la actualidad, ya no se hace mención explícita a Cataluña, pese a que los agentes insisten en que en localidades como “Solsona, Lérida, Manresa o algunas comandacias y acuartelamientos de Barcelona las pintadas y los insultos a nuestros compañeros y sus familias son constantes“, han explicado.
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