El actor y productor de la industria del cine pornográfico Nacho Vidal es padre de un niño que hoy es conocido como Violeta y cuya historia ha servido de base para la creación de un libro ‘Mi nombre es Nacho Violeta’, que se acaba de presentar.
En una entrevista concedida al diario El País, Vidal reconoce que el famoso autobús de HazteOir.org con el lema «Los niños tiene pene, las niñas tienen vulva» le hizo «montar en cólera» en un principio, pero que al calmarse, cambió de opinión: «Tienen todo su derecho. Si tú no quieres educar a tu hijo en la diversidad, yo tengo que respetarlo porque es tu hijo».
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraAnte la insistencia de la periodista sobre la cuestión, Vidal explica que el mensaje del autobús de HazteOir.org no supone ninguna agresión hacia sus hijos. «A mis hijos no les hace nada. Mi hija vive su vida», insiste.
Vidal , ante la imposición de leyes LGTBI: «Cuando dices ‘vamos a sacar leyes para que obliguen…’, en ese momento segregas odio»
Por otra parte, el productor pornográfico denuncia que los grupos de presión LGTBI como la asociaicón Chrysallis a la que perteneció, «imponen demasiado las cosas. Yo no puedo imponer a nadie hacer nada«, motivo por el cual explica que no se siente muchas veces de acuerdo con su manera de proceder.
«No me parece bien que te obliguen a hacer algo en lo que no crees. No me gusta imponer a nadie nada. Yo solo me meto en que no deberíamos obligar a nadie a hacer algo que no quiere. Cuando dices ‘vamos a sacar leyes para que obliguen…’, en ese momento segregas odio. Yo no quiero que tengan odio a mi hija, quiero que tengan empatía», insiste en otro pasaje de la entrevista.
Por otro lado, Vidal tampoco es partidario de la mutiliación sexual («castración» lo llama él) de los transexuales: «Preferiría que cualquier persona se aceptara tal y como es y no tuviera que llegar al extremo de castrar su pene o su vagina, igual que no debería cortarse un brazo o una pierna», aunque si alguien lo solicita él no se opondría.
En el caso de su vástago, asegura que «no tiene ningún problema con su pene» y lo expresa así: «No soy una niña en un cuerpo equivocado, soy una niña con pene”, aunque eso contradiga la Biología básica, de donde salió el mensaje del autobús de HazteOir.org.
Utilidad pública de HazteOir.org
Las palabras de Nacho Vidal, padre de un menor transexual, respecto del autobús de HazteOir.org cobran especial relevancia en este momento en el que el Gobierno ha incoado un expediente informativo con el objetivo de retirar la declaración de Utilidad Pública a la entidad.
Contundente respuesta de HazteOir.org al Gobierno por la utilidad pública
Da la casualidad de que los mismos funcionarios que hace unos meses no encontraron resquicio legal para retirar tal condición a la asociación presidida por Ignacio Arsuaga, con el cambio de Gobierno se han puesto manos a la obra para tratar de encontrar cualquier arista a la que agarrarse para retirar dicha declaración que beneficia, fundamentalmente, a los socios de HazteOir.org y sus donantes, que pueden acogerse a una deducción en el IRPF sobre las aportaciones.
No tanto así a la asociación en sí, por cuanto no hace uso, por principio, de subvenciones públicas, cuyos procesos de adjudicación privilegian a las organizaciones declaradas de utilidad pública.
En otro orden de cuestiones, Vidal asegura que «la pornografía no es machista»; que esta industria «no tiene que cambiar, tiene que cambiar la gente»; o que le molesta «muchísimo» que se relacione la violencia sexual con el porno (como recientemente ha hecho el Salón Erótico de Barcelona, que ha llamado a potenciar la pornografía feminista como «educación sexual antimanadas«).
