Un hombre de 45 años ha sido absuelto de cuatro acusaciones de malos tratos, después de que el Juzgado d elo Penal número seis de Córdoba (España) certificara que las heridas que presentaba la mujer habían sido autoinfligidas con el propósito de construir un caso en el que se aplicaría la llamada «violencia de género».
Este varón se libra así de la petición de casi tres años de cárcel (34 meses) reclamada por el Ministerio Público.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEn concreto se trataba de dos delitos de malos tratos sin lesión, otro de amenazas y otro de lesiones que, según la denunciante, sehabrían producido durante la relación que ambos mantenían desde abril de 2018 en la que llegaron a convivir en una casa junto a la hija del ahora absuelto.
La sentencia da por no acreditado que se hayan producido hechos como que le propinara una paliza con bofetadas, un rodillazo en el vientre y múltiples insultos; que en otra ocasión le agarrara del pelo, le metiera la cabeza en un barreño vacío, que le golpeara con una sartén y le vertiera encima su contenido; que le remitiera un mensaje amenazante; y que, por último, llegar aun día acasa, la insultara y golpeara, al tiempo que intentó forzarla a hacerle una felación.
La forense que analizó las múltiples heridas, hematomas y cortes, no dio credibilidad a la acusadora, dado que los cortes eran de pocoa profundidas, lineales y muy parecidos entre sí. «Son compatibles con un mecanismo de autolesión» realizadas con una cuchilla o un cortador de bricolage, tal y como refiere de la sentencia el diario ABC.
La resolución dictada por la justicia establece que la declaración de la acusadora «aparece teñida de absurdos y ambigüedades que no pueden dotar de veracidad a su testimonio. Por ejemplo, la denunciante declaró que era forzada a tener relaciones sexuales pero que en algún momento consintió».
Según se refiere, la mujer incluso fingió un desmayo en una de las ocasiones ne las que fue atendida por una ambulancia, hecho corroborado de forma indubitada por los sanitarios que la atendieron.