La organización masónica Gran Oriente de Francia, en colaboración con otras logias españolas, francesas y portuguesas, organizó un evento internacional en el que que abordaron asuntos como el cambio climático, la situación política de la Unión Europea y la laicidad y libertad de conciencia en el concierto internacional.
Para abordar este último capítulo, fue invitado el expresidente de Europa Laica Francisco Delgado en el que planteó que la «laicidad republicana» está «en peligrosa regresión». Después de una introducción histórica internacional, abordó el caso español.
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Suscríbete ahoraEn su alocución, Delgado alertó de que existen «guardianes de la fe que están en permanente alerta contra la libertad de conciencia» motivo por el cual «está aumentando el poder y la influencia de la religión y sus dogmas en las políticas y las leyes».
En concreto, señaló que en determinados ambientes internacionales como la Unión Europea, hay 55 organizaciones de inspiración religiosa acreditadas ante la Comisión y el Parlamento Europeo.
Delgado aseguró que «entre sus temas de interés se encuentran, además de la biotecnología, os enfoques éticos de la sanidad, entorpecer derechos de las mujeres como el aborto, opinar y presionar sobre determinados modelos de familia, tratar de evitar el derecho a la muerte digna, la Educación… etc. etc».
«Y lo hacen a través de lobbys muy potentes, como HazteOir.org entre otros», subrayó.
II República española, «oasis laicista»
El expresidente de Europa Laica, elogió ante los masones presentes en la reunión el periodo de la II República española, cuyas políticas anticlericales fueron el germen de la guerra civil.
Delgado calificó este periodo de «oasis laicista» que a su juicio «trató de establecer el Estado laico, la Enseñanza única y laica y la libertad de culto» (sic) sin hacer mención a las leyes anticlericales promulgadas por la II República.
Es más, Delgado definió la Constitución de la II República como «un ejemplo único -en la historia constitucionalista del Planeta- de ser una constitución plenamente laicista».