¡Hola, estimado lector!
¿Crees que el feminismo tiene sentido a estas alturas de la historia?
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEl director de Actuall definió este libro como “un catecismo antifeminista”. Su autora, Rosana Ribera, lo entiende como la forma de “plantar cara al feminismo radical”.
Yo diría que a ratos es una bomba antifeminista. Y en otros momentos, una estrategia para la destrucción de la idiotez en la que ha caído de pies y manos el feminismo actual.
El libro, que lleva por título Desmontando a las feministas radicales de un tetazo, está escrito en forma de preguntas y respuestas, lo que le dota de gran agilidad, pero su principal virtud es muy otra: no es un libro, es un campo de batalla.
Uno de los frentes está ocupado por las generalmente histéricas y a menudo lloronas feministas al uso, las que todos tenemos en mente, esas que hoy ocupan puestos en la Administración y algún que otro ministerio.
El otro frente, hasta ahora bastante ausente de la vida pública y que va cobrando creciente relevancia, es el que ocupan mujeres como Rosana Ribera, esas chicas que plantan cara al batallón de las lloronas sin el menor complejo:
“La civilización existe gracias a la unión del hombre y de la mujer (…) El feminismo radical está destruyendo la cultura (…) El ama de casa es la mujer luchadora por antonomasia”.
Hoy puedes leer en exclusiva la entrevista con la autora del libro, Rosana Ribera, que publicará Actuall en los próximos días. Aquí tienes el enlace.
Ribera reivindica un feminismo distinto, que nada tiene que ver con el feminismo institucional que vive del Estado y alimenta una doctrina tan tóxica como la ideología de género:
“Ser feminista en el siglo XXI en, por ejemplo, España, no significa tener que luchar contra la desigualdad. Esta prueba ya está superada.”
En su libro, Rosana Ribera dispara con la artillería de la razón, del entendimiento, incluso de la ciencia y del sentido común, para desmontar todos los tópicos y los lugares comunes del feminismo histérico. Y también lo hace en esta entrevista:
“Lo primero es que creo que el patriarcado está superado en los países occidentales; no me siento oprimida como mujer por un hombre opresor. Así pues, no quiero el enfrentamiento entre hombre y mujer (…) Es valiente dar la vida y es cobarde quitarla y defender el aborto del indefenso, como hacen las feministas en el marco de la llamada ideología de ‘género’.”
En los próximos días y hasta el dichoso 8 de marzo vamos a tener que aguantar con enormes dosis de paciencia ese insulto a la inteligencia que es el feminismo callejero, tan alborotador, manipulador y demagogo como todo lo que se inventa la izquierda para mantener a su parroquia dentro de la secta. La entrevista que te enlazo aquí ayuda a recordarnos que hay otra forma bien distinta de considerar a la mujer y de defender sus derechos.
Igual te interesa leerla antes de que esta semana se nos aparezca hasta en la sopa la ministra que habla gritando.
Casi a modo de terapia preventiva.
TU DÍA ACTUALL
Protección de Datos desestima la denuncia de CCOO contra la campaña #PINParental de HazteOir.org. HazteOir.org: “Sería deseable que el sindicato explicara qué interés tiene en que los grupos LGTBI se introduzcan en las aulas para adoctrinar». La Agencia de Protección de Datos descarta cualquier tratamiento de datos personales «en la difusión de información sobre el pin parental”. La noticia, aquí.
EE. UU. todavía financia el aborto en el mundo por un vacío legal en la política de la Ciudad de México. Las ONGs abortistas de EE. UU. todavía acceden a estos fondos y en proporción son mucho mayores que cuando la Política de la Ciudad de México no existía. La reelección de Trump podría eliminar este vacío legal y, junto a otras políticas provida, podría causarle un daño irreversible a la industria del aborto. La noticia, aquí.
La ministra Montero e Isabel la Católica. Las feministas de hoy son, por lo general, la peor propaganda para su propia causa. Irene Montero, como otros ministros, no es más que una cuota. Un peaje. Isabel la Católica no necesitaba vivir del postureo. Fue una auténtica gigante de la humanidad. Por eso ha dejado una huella imborrable en la historia. La noticia, aquí.
El marxismo cultural como religión de Estado y secta destructiva, por Francisco José Contreras. Los ‘social justice warriors’ son la juventud más sumisa de la historia: jamás había asumido con tanto entusiasmo la ideología oficial del momento: el marxismo cultural. Tenemos que detener a los profetas de esta religión del victimismo, el resentimiento y el odio, antes de que nos enfrenten aún más. La noticia, aquí.
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