No era el fin de año, pero lo parecía. La Puerta del Sol recibió una riada de jóvenes, una vez abierto el dique del toque de queda. La imagen se ha repetido en todas las ciudades españolas, o casi. Pero me quedo con la imagen del kilómetro cero porque me interesa fijarme en lo que hace pocos días han votado en las urnas.
Una encuesta realizada por NC Report para La Razón mostraba que el 58 por ciento de los jóvenes ha votado a Isabel Díaz Ayuso. Si le sumamos el 10,2 por ciento que ha entregado la papeleta de Vox, más un exiguo 2,3 por ciento que ha optado por Ciudadanos, tenemos que el 70,5 por ciento de los votantes jóvenes ha votado por el centro derecha; casi tres de cada cuatro. Por desgracia, la información de La Razón no nos detalla qué entiende por un votante joven.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEl Diario, dirigido por Ignacio Escolar, publica un análisis que no se basa en encuestas, sino en el análisis demográfico de los distritos. Y llega a conclusiones muy reveladoras. Una de ellas es que Isabel Díaz Ayuso mejora el resultado en todos los grupos de edad y en todos los niveles de renta. Los autores del análisis, Fátima Caballero, Raúl Sánchez y Victoria Oliveres, observan que “Ayuso ha logrado movilizar a más voto joven de lo que solía ser habitual en el PP. Crece en todas las franjas de edades, pero más en aquellos distritos censales donde abunda la población más joven que en los barrios más envejecidos”.
¿Por qué se produce esto? La socióloga Belén Barreiro, en la información de El Diario, dice que la candidata Ayuso ha logrado convertirse en una líder “de todas las generaciones”, pero no explica por qué. Javier Lorente da un paso más allá y dice que Ayuso “ha colocado un mensaje de esperanza con la gente encerrada”, una formulación muy ingeniosa, ya que con esas palabras le quita significado a la palabra “libertad”, que ha marcado toda la campaña.
Narciso Michavila, de GAD3, declaró a la Cadena COPE antes de que se celebraran las elecciones que “entre los 111.000 jóvenes, su partido preferido es Ayuso. Y no digo PP, digo Ayuso”. Acertó de pleno el sociólogo. Pero, de nuevo, ¿por qué?
Quizás estemos ante un cambio más relevante que el de unas elecciones autonómicas, que lo eran, y unas elecciones nacionales, que también lo eran. Y creo que quien ha dado con la clave es Javier Benegas, en su artículo Los jóvenes y la izquierda ceniza. Dice: “Los jóvenes no niegan el voto a la izquierda porque les sorba el seso YouTube en vez de un canal de televisión generalista. Simplemente han llegado a la conclusión de que la izquierda no les conviene”. Esta izquierda que impone sus valores y constriñe nuestro comportamiento no les sirve. Y quizás sea eso todo lo que ocurra.