Si algo erosiona la intención electoral de los partidos es la división interna. A Podemos le vino fatal las informaciones sobre la financiación venezolana, pero lo que realmemnte le derrumbó fue la ‘guerra civil’ entre Pablo Iglesias e Iñigo Errejón.
Tampoco en el PSOE la cosa está pacificada. Las informaciones truculentas de The Objective no sólo despiertan el morbo, sino que conducen a una inquietante pregunta: por qué el PSOE quiere ‘matar’ a un Ábalos que ya está políticamente muerto. ¿No será que quizás lo que pretende es enterrarle?
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraEl afectado lo niega todo y anuncia medidas legales. ¿Contra quién?, ¿contra el medio, contra la periodista o contra las fuentes?
Tampoco está pacificada la ‘parroquia’ en el PP. Por una parte, Génova parece empeñada en frenarle el paso a Ayuso. ¿Por qué?, ¿para qué? El secretario general, Teodoro García Egea, empuja a Almeida para que se interponga con Ayuso. Casado, deja hacer. La presidenta regional, que se crece ante la adversidad, acepta el reto y el choque de trenes. Y que sea lo que Dios quiera…
Recuerda demasiado a la bronca entre Esperanza y Gallardón. Un ‘deja vu’ de Pinpinella y Escarlata que no beneficia a los populares y que aleja la posibilidad de alejar democráticamente a Sánchez.
Por lo demás, breves apuntes de actualidad
- El Constitucional anula el impuesto de plusvalías, pero niega los efectos naturales de la nulidad, que no son otros que «se tendrá por no puestos». Es decir, el TC niega la posibilidad de recurrir un impuesto nulo si no se había recurrido antes. Mucho me temo que la última palabra la tendrá Luxemburgo que enmendará la plana al Constitucional
- Más cotizaciones. Los empresarios se plantan ante la propuesta de Escrivá de más cotizaciones para pagar las pensiones de los babyboomers. ¿Va a ser que era exactamente lo que pretendía Sánchez y su coaligada Yolanda que ha duplicado las subvenciones a los sindicatos?
- Religión climática. España destinará 1350 millones de euros para luchar contra el supuesto cambio climático. La nueva religión climática exige todos los sacrificios sin prometer ningún ‘cielo’..