Julio Borges, duputado opositor venezolano agredido por los chavistas / Twitter

Militares venezolanos impidieron este jueves a diputados opositores de la Mesa de Unidad Democrática (MUD) ingresar a la sede del poder electoral para exigir la activación de un referéndum revocatorio contra el presidente Nicolás Maduro.

El impedimento desató enfrentamientos entre opositores y chavistas, en los que fue golpeado brutalmente el parlamentario Julio Borges quien tuve que ser atendido de urgencias por tener el tabique roto, en una Venezuela desabastecida y sin medicamentos.

Algunas personas creen que La Sexta da información.

Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.

Suscríbete ahora

Las milicias formaron un cordón de seguridad frente a la sede del Consejo Nacional Electoral (CNE), en el centro de Caracas, y bloquearon entre empujones y gritos el paso de varios parlamentarios, que eran acompañados por decenas de simpatizantes.

La situación se volvió extremadamente tensa cuando los opositores quedaron cara a cara con un grupo de partidarios del oficialismo. «Revocatorio ya», gritaron los opositores ante los seguidores chavistas, que respondieron con un cántico repetido en las concentraciones del gobierno de Maduro: «Y va a caer, esta Asamblea va a caer», en referencia a la amplia mayoría opositora en el Congreso.

Además, utilizaron gases lacrimógenos para dispersar a los manifestantes. Algunos cruzaron golpes, mientras que militantes chavistas agredieron con palos al diputado y vicepresidente de la Asamblea Nacional (legislativo) Julio Borges, quien se refugió en la sede administrativa de la Asamblea legislativa, próxima al CNE.

Este no es el primer ataque que recibe el diputado Borges. Ya el 30 de abril de 2013, el diputado había sido brutalmente agredido en una sesión ordinaria de la Asamblea Nacional.

Los opositores exigen al Consejo Nacional Electoral definir las fechas para validar unas firmas que entregaron el pasado 2 de mayo como requisito para activar el referendo revocatorio. El proceso consiste en que los interesados acudan a certificar sus rúbricas con la huella dactilar, y cumplir así la primera etapa de un largo y engorroso proceso para sacar del poder a Maduro, elegido hasta 2019.

La intención del MUD radica en que el revocatorio debe celebrarse este año, de lo contrario asumiría el poder el actual vicepresidente y no podrían convocar a elecciones para modificar el difícil régimen al que se enfrenta Venezuela. Sin embargo, teniendo esto en cuenta, el Gobierno ha puesto varias trabas al procedimiento.

Comentarios

Comentarios