La Guardia Civil ha detenido de nuevo al ciudadano de origen marroquí, que ya fue arrestado la semana pasada por el incendio provocado en la iglesia de Fontellas, por derribar presuntamente una cruz de piedra situada en el tejado de la iglesia de Ribaforada.
Según ha informado Europa Press, el párroco de Ribaforada se puso en contacto con los agentes la Guardia Civil para informar de los daños cometidos en la cruz de piedra de la iglesia. Una vez allí, la policía encontró pruebas que vinculaban al anteriormente detenido por hechos similares.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEn esta nueva detención se le imputa un delito de quebrantamiento de sentencia de juzgado más un delito de daños contra patrimonios históricos. El arrestado se ha declarado autor de los hechos y está previsto que en las próximas horas pase a disposición del juez.
Cabe recordar que el Juzgado de Instrucción número 3 de Tudela acordó el alejamiento de centros religiosos católicos para el investigado por el ataque a las imágenes de la Virgen en la Iglesia de Fontellas.
En el auto el juez indica que, según la Unidad de Información de la Policía Nacional, en los últimos meses el detenido en esta causa presenta «un cambio de actitud», y varios hechos «hacen pensar que existe en el investigado una radicalización de carácter religioso».
Según informan las fuentes policiales, el ciudadano marroquí ha pasado «de llevar una vida totalmente normal, sin incidentes conocidos, a que en las últimas fechas, y tras un reciente viaje aprovechando las vacaciones estivales a su país de origen, Marruecos, se ha producido primero un hecho de gravedad con la entrada en la Iglesia de Fontellas, y los destrozos realizados en la misma, culminados con la quema de unas tallas que representan a la Virgen».
