Pese a que todo el stablishment estaba convencido que Hillary Clinton alcanzaría la Casa Blanca por segunda vez, en esta ocasión como presidenta, el hecho es que Trump fulminó las encuestas.
Los partidarios de Clinton y el Partido Demócrata, aún siguen preguntándose qué sucedió. Y a este debate se suman filosofos, intelectuales o escritores, como Stephen Markley, que ha abordado en un reciente artículo publicado en Paste Magazine el asunto desde una perspectiva clave: el aborto ha sido decisivo.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraMarkley, partidario del aborto, cree que el Partido Demócrata tiene que moderar su discurso sobre el aborto si quiere que sus candidatos ‘pro elección’ tengan mayores posibilidades de ser votados en los estados del centro de la Unión.
A su juicio, la dirección actual del Partido Demócrata es, «la más extrema que ha habido en relación al aborto» por lo que su discurso ha polarizado el voto en torno a esta cuestión, perjudicando a su candidata, Hillary Clinton.
Sólo el 29 por ciento de los estadounidenses cree que el aborto debe ser legal en todas las circunstancias
Mientras que Clinton se mostró incansable en su apoyo al aborto, y no dudó en hacer campaña de la mano de la multinacional abortista Planned Parenthood, Trump se comprometió durante a dejar de financiar con fondos públicos a la principal organización abortista del país.
«Trump se comprometió a respaldar iniciativas apoyadas por la mayoría de la poblacion americana según mostraban las encuestas como eliminar la financiación pública de Planned Parenthood, aprobar una ley que prohiba el aborto después de la semana 20 de gestación, o prohibir la financiación del aborto a través de los impuestos con una ley permanente que no necesite ser renovada cada año», señala Markley.
Por otra parte, Markley explica que el presidente electo Donald Trump ganó las elecciones no tanto porque ampliara el electorado republicano, sino porque los votantes demócratas no se movilizaron en estados clave, según recoge The Christian Post.
Polarización en torno al aborto
Markley considera que uno de los problemas sobre el debate del aborto es que está en «algunos mitos», uno de los cuales es que la opinión es binaria: o provida o proaborto.
Sin embargo, una encuesta de Gallup de principios de este año muestra que sólo el 29 por ciento de los estadounidenses cree que el aborto debe ser legal en todas las circunstancias, mientras que el 50 por ciento de la nación cree que el aborto sólo debe ser legal en ciertos escenarios y el 19 por ciento de la nación cree que el aborto no debe ser legal en absoluto.
Es más, señala Markley «hay algunas evidencias de que la gente joven acepta aún menos el aborto que sus padres». Un dato que el Partido Republicano tam vez no supo ver, o ignoró durante la campaña.
Dado que el Partido Republicano ahora controla las dos cámaras y la Casa Blanca, Markley abunda en la idea de que los demócratas se hacen un flaco favor apoyando de forma exclusiva a candidatos claramente abortistas.
Desde que el aborto se convirtió en una cuestión de interés nacional en los EE UU en la década de los 70, «nunca han tenido mayoría en ninguna de las dos cámaras del Congreso», recuerda.
Si el Partido Demócrata quiere ampliar sus fronteras «deberá apoyar y elegir candidatos provida» porque «los votantes de los centros no urbanos contuinuarán votando a candidatos que se oponen al aborto del mismo modo que lo han hecho toda su vida», aclara.