Los contribuyentes de Estados Unidos han estado financiando sin saberlo la compra de cerebros de fetos abortados destinados a la investigación. La empresa StemExpress, vinculada a Planned Parenthood, vendía estos cerebros por 1.080 dólares cada uno.

Este nuevo escándalo se ha conocido debido al cruce de correos que se produjo entre la neurocientífica de la Universidad de Connecticut, Nada Zecevic, y los trabajadores de StemExpress, y que ha desvelado The Washington Free Beacon.

Algunas personas creen que La Sexta da información.

Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.

Suscríbete ahora

Esta publicación revela que desde 2012 hasta la fecha actual la universidad utilizó de los fondos federales 10.161 dólares para comprar tejido cerebral de fetos, tal y como aparece en las facturas del centro universitario. De hecho, en este tiempo ha comprado dos cerebros al mes a la empresa abortista.

Un jugoso negocio para las clínicas abortistas

Estas facturas muestran una lista de precios pormenorizada: la bóveda craneal intacta se vende a 645 dólares mientras que el cerebro de un bebé abortado en el segundo trimestre está tasado según esta empresa abortista en 300 dólares.

Los fetos reaccionan ante estímulos como la música
Obama es cómplice del negocio montado con los fetos

En este sentido, los estadounidenses están financiando de manera indirecta el tráfico de órganos debido a que Obama da jugosas subvenciones a los investigadores que compran partes de bebés a Planned Parenthood a través de intermediarios como StemExpress.

La profesora de la Universidad de Connecticut Nada Zecevic, que realizaba estas gestiones ha recibido 3,8 millones de dólares de fondos públicos para sus investigaciones desde 2001, para las que ha utilizado numerosos cerebros fetales.

Tal y como ha quedado de manifiesto en los vídeos que se han publicado sobre las actuaciones de Planned Parenthood, los cerebros son junto con los hígados los órganos de bebés no nacidos más solicitados para estas investigaciones científicas.

En uno de estos vídeos se podía ver cómo una extrabajadora de Planned Parenthood relataba sobrecogida cómo su jefa le ordenó extraer el cerebro intacto de un feto cuyo corazón seguía latiendo. La supervisora al ver el feto dijo: “Este es un feto realmente bueno y podemos sacar mucho de él. Vamos a sacar el cerebro”.

Comentarios

Comentarios