El observador permanente de la Santa Sede ante la Organización de las Naciones Unidas, el arzobispo Ivan Jurkovic, denuncia que el Consejo Económico y Social de la ONU (ECOSOC) ha incluido un aspirador para hacer abortos entre sus paquetes de ayuda humanitaria de emergencia.
El pasado mes de abril aquel organismo actualizó sus política de actuación en casos de crisis humanitaria a través del documento titulado ‘Fortalecimiento de la coordinación de la asistencia humanitaria de emergencia de las Naciones Unidas’.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEn él se establece como «prioridad» que las mujeres en zonas de crisis humanitaria deben tener a su alcance el llamado «paquete de servicios iniciales mínimos para la salud reproductiva», según informa Life Site News.
«Los servicios sanitarios nunca deben estar destinados -u operar- contra la vida de los más indefensos» señala monseñor Jurkovic
Desde la ONU han preparado 13 modelos diferentes, todos ellos promocionando el aborto y la anticoncepción, pero el kit número 10 ha llamado especialmente la atención del representante católico por incluir un aspirador para hacer abortos.
«Nuestra delegación quiere insistir en que los servicios sanitarios nunca deben estar destinados -u operar- contra la vida de los más indefensos o el no nacido» ha señalado el purpurado.
Para el representate católico ante la ONU, que defiende la idea general de que las mujeres y niños en situación de especial vulnerabilidad deben tener acceso a cuidados sanitarios básicos, «no podemos aceptar como una solución apropiada aquellos servicios que facilitan o promueven el aborto».
Aborto por aspiración y legrado
La técnica del aborto por succión es utilizada para terminar con la vida intrauterina dentro de los tres o cuatro primeros meses de desarrollo normal del ser humano antes del parto.
En primer lugar, se utilizan diferentes instrumentos para dilatar la vagina y poder llegar hasta el útero.
En función de la edad gestacional y el tamaño del bebé, a quien ya le late el corazón, tiene piel, huesos y dedos, se aplica una mayor o menor fuerza de succión que por sí misma desmembra al feto.
El mayor riesgo de la aplicación de esta técnica es que durante el proceso de aspirado alguna de las partes del bebé quede olvidada, lo que puede producir hemorragias e infecciones.
Para evitar estos riesgos para la madre, se utiliza un instrumento, la legra, con la que se extraen los restos del interior del cuerpo de la mujer mediante raspado.
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