El gobierno de Trump ha emitido una orden que acabara este martes con el requisito federal de que los empleados violen sus valores participando en la provisión de anticonceptivos y medicamentos abortivos.
La medida fue puesta en marcha por Obama y provocaron que las Pequeñas Hermanas de los Pobres, monjas provida que cuidan a los ancianos, junto con el Lobby Hobby y otras entidades religiosas, se negaron a cumplirlo.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraY, es que, estas religiosas suministraban drogas y dispositivos anticonceptivos que terminaban con la vida de muchas personas. Un hecho que contradecía explícitamente su misión de respetar la dignidad de toda vida humana, según informan desde LifeSiteNews.
«El Departamento de Salud del Gobierno de Trump ha emitido una regla equilibrada que respeta todas las partes, mantiene el mandato anticonceptivo establecido para la mayoría de las empresas y ahora proporciona una exención religiosa», dijo Mark Rienzi, abogado principal de las Hermanitas de los Pobres.
Y añadió: «Las Pequeñas Hermanas todavía necesitan obtener un alivio final en la corte, lo que debería ser fácil ahora que el gobierno admite que violó la ley».
Una ley que brinda derechos a todas las partes
Las nuevas reglas, que son casi 300 páginas en total, permiten que las Pequeñas Hermanas de los Pobres y otros objetores tengan derecho a la conciencia de litigios.
«Estados Unidos tiene una larga historia de proporcionar protecciones de conciencia en la regulación de la atención de salud para las entidades y los individuos con objeciones basadas en creencias religiosas o convicciones morales«.
«Ningún estadounidense debería ser forzado a elegir entre los dictados del gobierno federal y su fe», dijo Trump
O «estas reglas no alteran otros programas federales que proporcionan anticonceptivos gratuitos o subsidiados para las mujeres en riesgo de un embarazo no deseado» son algunas de las nuevas normas.
Trump y la libertad religiosa
El Presidente Trump prometió poner fin a la medida de Obama durante su campaña. De hecho, firmó una orden ejecutiva de libertad religiosa en mayo de 2017 que parecía comenzar este proceso, aunque algunos conservadores sociales lo criticaron por ser «lamentablemente inadecuado». Sin embargo, las nuevas reglas de hoy cumplen con esta orden ejecutiva.
«Ningún estadounidense debería ser forzado a elegir entre los dictados del gobierno federal y su fe», dijo Trump cuando firmó esta orden en el Jardín de las Rosas de la Casa Blanca.
