EFE.
Un total de seis cajeros automáticos, un local de Iberdrola y dos inmobiliarias han sido atacadas esta pasada madrugada en Vitoria. Estos actos de terrorismo callejero los ha reivindicado la organización proetarra, Ernai.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraLos hechos han tenido lugar entre la 1.00 y las 5.00 horas de esta madrugada, cuando los seis cajeros automáticos y los accesos del local de Iberdrola y las dos inmobiliarias de la capital alavesa han sido rociados con poliuretano y sellados con silicona.
En estos lugares han aparecido carteles firmados por Ernai, que de manera poco habitual, ha reivindicado en un comunicado los ataques a estas instalaciones, dentro de una campaña contra las empresas que impiden a los jovenes emanciparse y construir su «propio proyecto de vida».
En el comunicado Ernai aseguró que han decidido «cerrar los locales» de entidades que son «responsables de la miseria» de los jovenes. «Vosotros sois un obstáculo para la emancipación de la juventud y os queremos fuera de nuestras vidas», reza el pasquín distribuido por Ernai, que advierte de que seguirá actuando para «subvertir» las «bases corruptas del sistema actual».
Además asumen haber boicoteado los accesos de otras entidades como el Servicio Vasco de Empleo (Lanbide), oficinas de seguros y empresas de trabajo temporal.
«Es un atentado contra la democracia»
El portavoz del Gobierno Vasco, Josu Erkoreka, ha considerado que estos actos son «intolerables en una sociedad democrática». Además, ha expresado que estos hechos que expresan «intolerancia, coerción y voluntad de violencia», está «fuera de lugar» en una sociedad en la que se pueden expresar todas las protestas «con libertad y sin limitaciones, por cauces democráticos y pacíficos».
También la Juventudes Socialistas de Euskadi han repudiado los ataques violentos y han exigido a Ernai no sólo que los condene, sino que expulse a quienes los han cometido.
A su juicio este terrorismo callejero son «una cobardía, un atentado contra la democracia y contra la ciudad de Vitoria» y el hecho de que Ernai «asuma con orgullo la autoría de estos actos» demuestra que sus miembros «siguen anclados en el pasado, que siguen defendiendo la violencia como única forma de conseguir sus objetivos políticos».