En el año 2014 fui diagnosticado con una enfermedad y desde ese momento empecé a buscar alternativas diferentes de vida.
Mi historia, como dice su artículo, estuvo llena de ansiedad, depresión, deseos suicidas e infelicidad. Al buscar en internet encontré esta página de Es Posible La Esperanza, empecé a leer su contenido y me mandaron un libro, unos vídeos, un test y unos ejercicios. Empecé emocionado a realizar todo esto, y encontré muchas personas con historias tétricas y muy similares a las mías.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraMientras más me adentraba a las causas de mi Proyección al mismo Sexo (PMS) y viajaba a mi niñez, más aumentó mi ansiedad y deseos suicidas. El acompañamiento de sacerdotes de la página, unos compañeros de camino y orientadores me ayudaron un poco. También conocí amigos con los que pude compartir todas estas desavenencias.
Hoy, año 2019, después de un profundo viaje a mi niñez, he conocido a los culpables de mi PMS (Proyección al Mismo Sexo), que fueron principalmente mis padres que abusaron sexualmente de mí, entre otras cosas. Los perdoné, reparé mi alma, convertí mi dolor en fuente de vida.
En marzo mi enfermedad anal, que se debió a esas nocivas relaciones homosexuales, se empeoró. Le envío una foto, he sufrido mucho, sangro aún por mi ano. En mayo me harán un examen de colonoscopia para revisar qué puede ser. Adicional a eso, también tengo una enfermedad venérea diagnosticada en 2018. No quiero volver a esa vida homosexual, para mí es suficiente controlar mi atracción, porque sé de testimonio vivo, que eso me hizo daño.
Fueron más de 20 años en una vida que no siento que sea para mí feliz, sé que esto lo puede a usted ofender y también irse en contra mía, pero en la tolerancia está aceptar a los que piensan diferente, si no le hacemos daño a otros.
Yo sé que usted tiene su visión de la vida, lo que está bien y mal, sobre la que es justo e injusto. Sé que puede denunciar y acabar esa página, pero no sabe el mal tan grande que le haría a las personas que queremos otro estilo de vida porque hemos sufrido mucho.
Le pido el favor que tenga misericordia de mí y de las otras personas que se han acercado a estos grupos. No nos haga el mal de aniquilarnos por la ley. Se lo suplico, tenga piedad.
Le agradezco mucho por leer mi testimonio y espero hablar con usted en otras ocasiones.
Dios lo bendiga.
Charbel.
* Testimonio recogido por Es posible la Esperanza en apoyo del obispo de Alcalá de Henares, monseñor Juan Antonio Reig Pla, que mantiene un servicio de acompañamiento a personas con Proyección hacia personas del Mismo Sexo (PMS).