Puedes insultar a España, a la Corona, a las Fuerzas de Seguridad y a las Fuerzas Armadas, mofarte de los creyentes y de las víctimas del terrorismo, pero ojito con hablar de las virtudes maternas.
Ése parece ser el mensaje lanzado hoy por el PSOE, uno de cuyos dirigentes, Ximo Puig, preside la Generalidad valenciana. Y es que el gobierno socialista-nacionalista de la Comunidad de Valencia ha abierto un expediente sancionador a El Corte Inglés por su campaña del Día de la Madre, de la que ya os hablé aquí.
Una campaña totalmente inocua, pero que ha despertado las iras de la izquierda más fanática e intolerante. Según la Generalidad valenciana, la campaña de El Corte Inglés “fomenta un estereotipo de madre que resigna a las mujeres a cumplir con su papel de ‘buena madre’ basado en la entrega por encima del resto de identidades que la conformen”.
Un total disparate que demuestra el grado de absurdo del feminismo progre, y que responde no a un análisis objetivo de la campaña, sino a un burdo juicio ideológico de los socialistas, que están imponiendo sus opiniones por encima de la libertad de expresión.
Un ataque a las libertades que implica recuperar la censura gubernativa
Hay que recordar, además, que el artículo 20 de la Constitución Española protege el derecho fundamental a “expresar y difundir libremente los pensamientos, ideas y opiniones mediante la palabra, el escrito o cualquier otro medio de reproducción”, incluida “la producción y creación literaria, artística, científica y técnica”.
También señala que este derecho “no puede restringirse mediante ningún tipo de censura previa”. Hay que recordar, por otra parte, que cualquier exceso en el ejercicio de un derecho fundamental debe sancionarlo un juez mediante una causa judicial, y no un órgano administrativo a las órdenes de un partido político. Con este expediente, el PSOE recupera de hecho la censura gubernativa, una herramienta de represión propia de una dictadura.
El PSOE considera legítimo insultar a España, a la Policía y a nuestros militares, e incluso humillar a las víctimas del terrorismo, pero no tolera que se hable de buenas madres
Hace sólo unos meses el PSOE apoyó legalizar los insultos a España
Se da la circunstancia, además, de que esta reaparición de la censura de la mano de los socialistas llega sólo unos meses después de una votación en la que el PSOE apoyó legalizar los ultrajes a España y a la Corona, las humillaciones a creyentes y a víctimas del terrorismo y los insultos a los Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado y a las Fuerzas Armadas.
En esa votación los socialistas coincidieron con Bildu, con Podemos y con los separatistas, es decir, con quienes apoyaron la moción de censura que llevó a Sánchez al poder el año pasado. Dicho sea de otro modo: El PSOE considera legítimo insultar a España, a la Policía y a nuestros militares, e incluso humillar a las víctimas del terrorismo, pero no tolera que se hable de buenas madres. El mundo al revés.
Con esta actitud, el PSOE está adoptando claramente un perfil propio de la extrema izquierda. Espero sinceramente que El Corte Inglés plante cara a esa cacicada en los tribunales, porque lo que pretende el PSOE con esta persecución es amedrentar y tapar la boca a todos los que no estamos de acuerdo con sus disparates ideológicos.
* Publicado originalmente en Contando Estrelas.
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