La alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, se congratula estos días del éxito que ha supuesto el World Pride que acaba de tener lugar en la capital y en el que se ha podido celebrar la diversidad sexual con banderas arco iris en todos los establecimientos, edificios municipales y sobre todo, ayuntamientos.
Sin embargo, Carmena se niega a desplegar una pancarta en homenaje a Miguel Ángel Blanco el próximo miércoles -vigésimo aniversario de su asesinato por ETA- porque no se pueden diferencias unas víctimas de otras.
Tan solo pedían la colocación de una pancarta en su memoria del que fuera diputado del PP Miguel Ángel Blanco en el palacio de Cibeles
Esta iniciativa la solicitó el Movimiento contra la Intolerancia, que únicamente pedía la colocación de una pancarta en su memoria del que fuera diputado del PP Miguel Ángel Blanco en el palacio de Cibeles, coincidiendo con la fecha de su asesinato por la banda terrorista vasca.
Pero esa distinción supondría una discriminación para con el resto de víctimas, «ya que sería crear víctimas de primera y de segunda» aseguran desde el Ayuntamiento. Y no solo en Madrid, en muchas otras ciudades de España Podemos se aferra a este argumento para evitar reconocer a Miguel Ángel Blanco.
Véase el alcalde podemita de Cádiza, alias ‘Kichi’, que se ha negado a conceder una calle esta víctima de ETA bajo la misma premisa.
Dice Carmena que ellos, Podemos, no se niegan a homenajear a Blanco, pero no pueden hacerlo de forma individual. Para no discriminar tendrían que unirse a algún homenaje en el que se honrase la memoria de un colectivo de víctimas.
Por eso, todavía no han rechazado de plano unirse a algún homenaje que se realice en la ciudad de Madrid, pero bajo esas características, y desde luego nada de pancartas en el 20 aniversario de la muerte de una sola víctima, no vayan a discriminar al resto.
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