La Cámara de Representantes de Dakota del Norte ha aprobado un proyecto de ley para prohibir a funcionarios estatales y locales, centros educativos y empresas privadas exigir el uso de mascarillas. La asamblea, en la que el Partido Republicano disfruta de una amplia mayoría de 80 diputados frente a los 14 del Partido Demócrata, ha decidido por 50 votos frente a 44 aprobar la medida y enviar el documento al Senado, en el que los republicanos cuentan con una diferencia de 40 a siete.
La voluntad de la Cámara Baja nordakoteña de convertir en ilegal la obligatoriedad del uso de mascarillas se manifiesta tres meses más tarde de que el gobernador Doug Burgum impusiera un mandato de cobertura facial (uso de mascarillas) en todo el estado, a pesar de haber expresado su escepticismo previamente. Y apenas días después de que el Centro para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) publicara un estudio basado en las pruebas realizadas con maniquíes y aerosoles que defiende el uso de una mascarilla de tela sobre otra quirúrgica como método para disminuir la propagación del virus.
En la misma línea se ha pronunciado recientemente Anthony Fauci, director del Instituto Nacional de Alergias y Enfermedades Infecciosas, homólogo de Fernando Simón en los Estados Unidos y funcionario mejor pagado del país, quien meses atrás, como Simón, se posicionó en contra del uso de mascarillas: “Cuando se está en medio de un brote, usar una mascarilla puede hacer que la gente se sienta un poco mejor e incluso puede bloquear una gota, pero no da la protección perfecta que se piensa. Y, a menudo, hay consecuencias no deseadas: la gente juega con la mascarilla y sigue tocándose la cara”.
Más tarde, cuando cambió de postura, también como Simón, negó arrepentirse de lo defendido anteriormente, “porque en el contexto del tiempo en el que lo dije, fue correcto. Nos dijeron en nuestras reuniones del grupo de trabajo que teníamos un grave problema por la falta de EPI y mascarillas”.
«Están robando nuestras libertades»
El promotor del proyecto de ley, Jeff Hoverson, representante republicano por la ciudad de Minot, ha descrito la obligatoriedad de la mascarilla como parte de una estrategia impulsada por “burócratas ricos, no electos, que están robando nuestras libertades y perpetuando mentiras”. En la sesión parlamentaria, Hoverson ha defendido que Dakota del Norte debería ser libre como su estado hermano del sur y ha calificado los mandatos de cobertura facial como “estupideces diabólicas”.
Además del promotor, Kathy Skroch, representante republicana por Lidgerwood, y otros partidarios del proyecto de ley han sostenido que el uso de mascarillas no ayuda a prevenir la propagación del virus, como demuestran los datos de estados y ciudades en los que no se ha impuesto la medida con carácter obligatorio.
Tennessee puede ser el siguiente
Tras Dakota del Norte, Tennessee puede ser el siguiente estado en ilegalizar la obligatoriedad del uso de mascarillas. Dos legisladores estatales republicanos, el senador por el distrito 28 Joey Hensley y la representante por el distrito 57 Susan Lynn, están impulsando un proyecto de ley para proteger a empresas y consumidores de la discriminación médica, cuya aplicación reconocerá el requerimiento de cobertura facial como una violación de las libertades civiles y señalará como discriminatorio que una persona o una empresa le niegue a un individuo el acceso o el disfrute de bienes o servicios en función del uso de determinados dispositivos.
Igual que en el estado fronterizo con Canadá, en la tierra de Elvis los republicanos gozan de una amplia mayoría en ambos hemiciclos. En la Cámara de Representantes cuentan con 73 de 99 asientos, mientas que en el Senado la diferencia con los demócratas es de 28 a cinco.
Con la aprobación de la ley, las administraciones inferiores de Tennessee (condados y ciudades) no podrán imponer el uso de mascarillas. Así, las empresas ya no serán responsables jurídicas en caso de que sus empleados o clientes no se cubran el rostro en sus instalaciones. Tampoco los centros de culto tendrán que responder legalmente por sus feligreses.
¿Un nuevo modelo legislativo?
Actualmente, unos 35 estados mantienen la obligatoriedad del uso de mascarillas a algún nivel administrativo. La mayoría, mediante la aplicación de leyes que otorgan poderes de emergencia, excepcionales.
Las nuevas medidas impulsadas en Dakota del Norte y Tennessee suponen un cambio de tendencia y un avance hacia el reconocimiento del uso de medios de protección personal como una decisión de cada ciudadano, no del poder público o de empresas privadas. Un nuevo modelo tanto para estados cuyo gobernador haya impuesto el uso de mascarillas, como para aquellos en los que nunca han sido obligatorias.
Comentarios
Comentarios