El Ayuntamiento, contra sus vecinos. El tripartito de izquierda que gobierna en Callosa del Segura, Alicante, sigue empeñado en derribar una cruz que recuerda en el pueblo a quienes fueron asesinados por el Frente Popular durante la Guerra Civil.
Desde que se conoció la intención, los vecinos se han movilizado de tal forma que al equipo de gobierno local le ha sido imposible culminar sus planes.
La Plataforma Ciudadana en Defensa de la Cruz lleva haciendo guardia, cumpliendo los debidos requisitos legales, desde hace más de un año, para defender un monumento que siente como parte de la historia del pueblo y de su singularidad.
El regidor Fran Maciá ha diseñado un dispositivo para que se corten todos los accesos al casco histórico de la localidad
Según detalla el Diario Información de Alicante, el alcalde ha reclamado a la subdelegación del Gobierno que la próxima semana se ponga en marcha un dispositivo para expulsar por la fuerza a los vecinos de la plaza donde se encuentra la cruz, por lo que sería necesaria la participación de la Guardia Civil y la Policía Nacional.
El regidor Fran Maciá tiene previsto que se corten todos los accesos al casco histórico de la localidad, circunstancia para la que necesita la autorización de la Subdelegación gubernativa.
El consistorio prevé que los trabajos de retirada de la cruz se alarguen entre el próximo lunes 22 de enero hasta el 2 de febrero de 2017, aunque los defensores del monumento cumplen todos los requisitos para estar concentrados allí de forma ininterrumpida hasta el día 28 de enero.
Un juzgado de Elche consideró que la retirada del monumento está avalada por la Ley de Memoria Histórica, alegando que , más allá de la simbología religiosa, «se erigió para conmemorar una sublevación militar y honrar a los vecinos pertenecientes a la facción ganadora que murieron durante la Guerra Civil».
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