Por su interés, reproducimos un extracto del artículo publicado por el general Rafael Dávila un su blog en referencia a los comentarios del alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, al pedir una «Academia militar no militarista».
Si la situación general de España fuese otra me lo tomaría como una broma de mal gusto, de un mal educado, pero broma al fin y al cabo.
El alcalde de Zaragoza y el general de la Academia General Militar han presentado en el ayuntamiento los actos conmemorativos del 90 Aniversario de la Academia en Zaragoza.
De manera improcedente, sin el más mínimo respeto al recibir a una institución tan representativa y querida en su ciudad, el alcalde ha dado una lección de mala educación y falta de respeto.
El alcalde de Zaragoza pide una Academia militar desmilitarizada y que desaparezcan las instalaciones militares
En su alegato, tan malintencionado como mal construido, pide una Academia militar desmilitarizada y que desaparezcan las instalaciones militares, permitiéndose aconsejar que afronten el reto de problemas como la corrupción, la falta de transparencia, la violencia de género o el mobbing laboral. Brillante cabeza.
Lo hemos entendido. Fuera de momento y lugar, pero entendido. Sí, sabemos lo que dice y lo que quiere decir. Suelen hacer las tortillas sin huevos. Ha dicho, pero no ha dicho…, ha querido decir…, no, no es eso lo que ha dicho…
Creo recordar las declaraciones de este alcalde cuando los atentados yihadistas en Bruselas. Aquella brillante cabeza se atrevió a decir:
‹‹Producto de agresiones que hemos hecho los países occidentales a terceros países y de alguna forma nos vuelve esa violencia que hemos contribuido a sembrar por el mundo››.
De nuevo el agitprop. No es novedad.
–El Talarn (Lérida): retiran de la Academia General Básica de Suboficiales el lema ‹‹A España servir hasta morir›› (Bono ministro de defensa).
–Barcelona: Su alcalde (Convergencia) se negó a que la ceremonia de la entrega de la Bandera de Combate al buque insignia de la Armada se llevase a cabo en Barcelona. La madrina iba a ser la Reina Doña Sofía. El deseo e interés de la Casa del Rey para que allí se realizase de nada sirvió.
–Ferrol: su alcalde, con inadecuada vestimenta, recibía oficialmente, en visita de cortesía, a los comandantes de dos buques de La OTAN, canadiense y noruego, soltándoles una impropia perorata.
–Barcelona: la alcaldesa muestra su rechazo al Ejército en el Salón de la Infancia, cuando es el más visitado de la Feria de Barcelona.
Contundentes muestras de afecto. Hay muchas más que se silencian. Mejor dejar las cosas como están (que están muy mal).
Dávila: «Que te inviten a tu casa para darte lecciones e insultarte no es muy correcto.. la moderación y equilibrio exigido, no es razón para permanecer siempre en silencio»
Que te inviten a tu casa para darte lecciones e insultarte no es muy correcto. La corrección que todo militar debe tener con las instituciones, la moderación y equilibrio exigido, no es razón para permanecer siempre en silencio y soportar, en ocasiones ocultando los hechos, insultos o diatribas sin venir a cuento. Con respeto y argumentos todo y todos tienen respuesta.
Pero nadie, uniformado o no, dice palabra alguna. Incluso a veces parece que oímos: ¡amén!
General de División (R.) Rafael Dávila Álvarez
Comentarios
Comentarios