Tras los resultados de las elecciones generales del 20 de diciembre, Podemos y ERC entrarán a formar parte de la comisión de secretos oficiales encargada de fiscalizar las operaciones del Centro Nacional de Inteligencia (CNI).
Además de estos dos grupos el resto de los seis asientos los completarán PP, PSOE, Ciudadanos y previsiblemente PNV o Coalición Canaria, puesto que si el otro sillón lo obtuviese Democracia i Libertad los independentistas tendrían una gran presencia en la comisión, una opción que no contemplan desde el Gobierno en funciones, según recoge Meridian.
La función de este selecto grupo es reunirse para tratar asuntos de emergencia como amenazas terroristas, relaciones internacionales con países en situaciones delicadas o el destino de los fondos reservados de la inteligencia española, 20 millones de euros anuales. Todo ello a puerta cerrada y con el máximo secretismo.
La delicadeza de muchos de estos asuntos provoca un gran recelo entre los trabajadores del CNI (4.000 empleados) que miran con cierta preocupación a los ocupantes de esta comisión, en especial a ERC y a Podemos.
Veto del PP
En la anterior legislatura el Partido Popular vetó la presencia de ERC en esta comisión pese a tener grupo propio con los proetarras de Amaiur. Pero en esta ocasión, los resultados del partido de Oriol Junqueras, con nueve diputados en el Congreso, por encima incluso de DiL, le permiten entrar en la comisión más secreta del Estado.
Las relaciones entre el partido catalán y el CNI no han sido muy fluidas en los últimos años, sobre todo desde que ERC acusó al espionaje español de intentar infiltrarse en sus filas.
Lo normal es que sean los portavoces de los partidos los que ocupe los sillones de esta comisión, como en la pasada legislatura en la que los miembros fueron: Rafael Hernando (PP); Soraya Rodríguez (PSOE); Josep Durán i Lleida (CiU); Cayo Lara (IU); Rosa Díez (UPyD) y Aitor Esteban (PNV).
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