Pablo Iglesias se la tiene jurada al Rey, porque ha debido creerse poco menos que Largo Caballero y piensa que Felipe VI es Alfonso XIII a punto de tomar las de Villadiego.
Juega a republicanote, frentepopulista, defensor del pueblo oprimido por los zares, martillo de herejes capitalistas, y desde que hizo su aparición en la vida pública no pierde ocasión de lanzarle indirectas “guillotinescas” al Rey, como cuando le regaló Juego de tronos, su Biblia para alcanzar el poder.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraY no pierde ocasión de poner en cuestión el papel de la Corona. Últimamente ha aprovechado la trágica matanza de Barcelona y Cambrils para empañar más la imagen del Rey (y del Gobierno) responsabilizándole de los hechos por la venta a Arabia Saudí de unas armas que acaban en manos de los yihadistas.
Todo es tan peliculero como el guión de Juego de tronos pero, sintiéndolo por Iglesias, la CUP o Teresa Rodríguez, no es real. Sino inexacto, falaz y demagógico.
Lo que dan a entender lo podemistas no son sino ‘fake news’ y sofismas.
1.Más que armas eran aviones y repuestos…
Es verdad que España ha vendido material de defensa a Arabia Saudí, pero no eran exactamente armas sino aviones y repuestos. En 2015 se vendieron dos aviones de reabastecimiento en vuelo (447,4 millones) y un avión de transporte (33,2 millones), además de repuestos para las aeronaves, granadas, munición de armas ligeras y un sistema de vigilancia de perímetro.
Y en 2016 (por valor de 100 millones de euros) repuestos para aviones de transporte, proyectiles y granadas. No son el tipo de armas que usan los yihadistas.
Por cierto, una de las comunidades que más factura por venta de armas es Cataluña: casi 45 millones de euros, de los cuales 1’6 millones se los pagó Arabia Saudí.
2.Las armas del IS no salen de España sino de las que han arrebatado al ejército iraquí
Como Podemos debería recordar, el Estado Islámico lleva tres años de guerra en Irak, y es de sus conquistas territoriales de donde suele obtener la mayor parte de las armas y municiones.
Como señalan los informes de Amnistía Internacional, la mayoría de las armas convencionales que utilizan los combatientes del IS son de hace décadas, de los años 80 y 90, por ejemplo de conflictos como el de Irán-Irak (que terminó en 1988). Parte del armamento procedía de EEUU, la antigua URSS y China y era suministrado al régimen de Bagdad. Nada que ver, por tanto, con el régimen de Riad.
Usan fusiles de la antigua Yugoslavia o material casero para su terrorismo low-cosT
3.Y las de los yihadistas que atentan contra Europa proceden del mercado negro de países del Este
Pero es que además, quienes atentan en Europa acuden al mercado negro del Este o se buscan la vida para su terrorismo “low cost”, con artefactos caseros o uso de camiones y furgonetas, propio de la Intifada de los atropellos.
Basta repasar los atentados de los últimos años para constatar que el armamento no procede del conflicto de Siria o Irak.
Así, el terrorista que atacó un supermercado judío en 2015, y asesinó a cinco personas, empleó un fusil Vz.58 fabricado por la firma CSA en Chequia.
Y los fusiles con los que tres yihadistas perpetraron la matanza de Bataclán eran marca Zastava M70, versión yugoslava del AKM soviético, junto con dos fusiles Tipo 56, copia china del AK.
Por no hablar del centenar de bombonas de gas butano (del chalet de Alcanar), de la furgoneta de la Ramblas o del camión de Niza. ¿Qué tiene que ver Arabia Saudí con ese tipo de “armamento”.
4.No dependen de la financiación de Arabia Saudí
Ni siquiera económica dependen del soporte de Riad o de los petrodólares. La célula catalana adquirió las bombonas de Alcanar con dinero de la venta de joyas y oro; el mencionado asaltante del supermercado judío pidió un préstamo personal de unos miles de euros concedido por una entidad que se anuncia en televisión; y quien arrolló a 67 personas en Berlín, en las pasadas navidades, no se gastó un duro en el “armamento” homicida: robó el camión a punta de pistola y mató al conductor.
¿Dónde está la financiación de origen saudí? Las células yihadistas que operan en Europa no se financian con las transferencias desde paraísos fiscales.
5.Y además, ni siquiera es lo mismo Arabia Saudí que el IS, ni tienen la misma estrategia
Es cierto que Arabia Saudí es una teocracia y una dictadura incompatible con la democracia, en la que no se respeta los derechos humanos. Pero ni es lo mismo que el Estado Islámico, ni lo es su concepción del Corán, ni tampoco sus estrategias.
Iglesias debería saber que una cosa es el wahabismo de Arabia Saudí y otra el salafismo del Estado Islámico
Pero Iglesias debería saber que una cosa es el wahabismo de Arabia Saudí y otra el salafismo del Estado Islámico.
El primero nace en el siglo XVIII de un pacto de la dinastía Al Saud con el clérigo Abd-al-Wahhab. Este daba legitimidad a los gobernantes Al Saud a cambio de la hegemonía religiosa en sus territorios. Hasta hoy. Los wahabíes de Arabia Saudita son salafistas quietistas. ¿Qué quiere decir esto? Que esa rama tiende a centrarse en asuntos rituales y doctrinales, rechazando por completo la implicación en asuntos políticos.
En tanto que el IS se adscribe a la rama salafista-yihadista, que pretende purificar el Islam y regresar a los orígenes, a sangre y fuego si es preciso. Quiere demoler el orden creado en Oriente Medio por las potencias coloniales, del acuerdo Sykes-Picot, de la I Guerra Mundial y construir un nuevo califato.
Y el origen de ese empeño no es precisamente saudí. Sino del egipcio Sayid Qutb, miembro de los Hermanos Musulmanes. Según éste, si los dictadores árabes pasaban a ser considerados el equivalente a paganos no se rompía el tabú de matar a otros musulmanes en caso de magnicidio.
Es decir, que a los saudíes no están por la labor de los yihadistas salafistas del Estado Islámico. Tienen intereses geoestratégicos diferentes.
Comprendemos que quien, como Pablo Iglesias, no es capaz de distinguir el wahabismo de la salsa wasabi tampoco es capaz de captar distinciones tan elementales.
