Guardias civiles y policías nacionales se manifestarán el sábado en la Puerta del Sol, a las 11.30 de la mañana, para reclamar la equiparación salarial con los Mossos de Esquadra y la Ertzaintza.
Agentes de ambos Cuerpos llevan años reclamando que se igualen sus salarios a los de las policías autonómicas, de los que les separan aproximadamente unos mil euros.
La concentración está convocada por Jusapol, una joven asociación que integra a guardias y policías nacionales, y está secundada por la AUGC, mayoritaria entre guardias civiles, y la Unión de Oficiales (UO), aunque no por el Sindicato Unificado de Policía (SUP). Se espera la participación de representantes del PSOE y Ciudadanos.
Los diferentes cuerpos policiales autonómicos sólo se ocupan de cubrir el 11% de las competencias recogidas en los artículos 11 y 12 de la Ley Orgánica de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado.
Sin embargo sus agentes reciben un salario mucho mayor que el de los miembros de la Policía Nacional y la Guardia Civil. A lo largo de la última década los encargados de velar por la seguridad de la inmensa mayoría de los españoles han aguantado primero, el tijeretazo del 5% ordenado por José Luis Rodríguez Zapatero que afectó a todos los funcionarios. Y despúes, las sucesivas congelaciones de sueldo decretadas por los gobiernos de Mariano Rajoy.
Los hechos acaecidos con motivo del referendum ilegal celebrado en Cataluña en pasado 1 de octubre han despertado en toda España una ola de solidaridad con la Policía Nacional y la Guardia Civil que sus miembros no quieren desaprovechar para reivindicar lo que entienden que es justo.
Los partidos políticos, conocedores de las corrientes de opinión pública han querido hacer ver su interés por esta reivindicación, con la votación en el Congreso de una proposición no de ley impulsada por el Partido Popular y apoyada por PSOE y Ciudadanos.
Fernando Ramírez, de APROGC: «Promesas hemos tenido toda la vida, de todos los partidos y todas se han incumplido»
En dicha proposición, sin valor jurídico, se enalzaba la «labor de defensa y protección de los derechos y libertades de todos los ciudadanos y especialmente y desde la legalidad constitucional de la soberanía nacional, el Estado de Derecho, la democracia y la convicencia» de Policía Nacional y Guardia Civil.
Por otro lado, la propuesta instaba al Gobierno a que incorpore en los presupuestos a partir de 2018 «las partidas necesarias para resolver progresivamente los desequilibrios retributivos que puedan existir entre los diversos miembros de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado».
Preguntado por Actuall, Serafín Giraldo, portavoz de la Unión Federal de Policía (UFP), considera que la proposición es poco menos que un brindis al sol. En sus palabras, «un acto simbólico».
Por su parte, Fernando Ramírez, de la Asociación Pro Guardia Civil (APROGC), señala que el Gobierno les ha trasladado la intención de que durante esta legislatura se llevaría a cabo esta equiparación, pese a lo cual, recuerda, «promesas hemos tenido toda la vida, de todos los partidos y todas se han incumplido».
Pero aunque se trate de una mera táctica política, Ramírez no le hace ascos a este movimiento oportunista porque ¿cuál es nuestra oportunidad? Si es esta, haremos lo posible para que se haga realidad».
En esta línea se está movilizando también la sociedad civil. Una de las iniciaitvas es la impulsada por HazteOir.org que ha organizado una campaña para reclamar al Gobierno y a los partidos políticos que promuevan la equiparación salarial y que ha concitado el apoyo de más de 20.000 ciudadanos en apenas tres días.
No va a ser fácil. Con los 80 millones de euros comprometidos hasta ahora no llega. «Lo que está previsto hasta ahora es muy poco», incide Ramírez. «Hacen falta 1.100», puntualiza Giraldo.
Y es que la diferencia salarial es mucha. Alrededor de 600 euros mensuales brutos, unos 400 netos, que en 14 pagas son 5.600 euros anuales limpios menos.
Los que salen peor parados en la comparación son los Guardias Civiles, de lejos. Y no es sólo por una cuestión monetaria, porque para tener una idea clara de lo que supone el agravio monetario hay que echar cuenta también otras variables.
No sólo se trata de que todos desempeñan labores policiales, sino de valorar cuáles son sus atribuciones, las misiones que desempeñan, sus resultados, etc. Ramírez se muestra especialmente contundente en este punto:
«Lo que es lamentable es que estemos luchando por una equiparación con fuerzas policiales que son, con todos mis respetos, de inferior nivel que la Guardia Civil, en lugar de que otros estuvieran luchando por equipararse con nosotros que somos los que tendríamos que estar a la cabeza».
Los sindicatos de la Policía recuerdan la instrumentación de los Mozos de Escuadra desde tiempos de Jordi Pujol
Nacionalismo y cuerpos policiales
Un informe elaborado por los diferentes sindicatos policiales sobre sobre los agravios entre policías refiere que, siendo el socialista Juan Alberto Belloch ministro de Justicia e Interior, anunció que abordaría la cuestión de la brecha salarial entre cuerpos policiales.
«Pujol replicó de inmediato que aunque así fuera él daría 5.000 pesetas más, que entonces se hablaba en pesetas para que los ‘mozos’ siempre cobraran más que nosotros». Belloch no cumplió, pero el interés de los nacionalistas en mimar a las policías autonómicas ha permanecido impoluto desde entonces.
No en vano, apenas dos meses antes de la celebración del referendum ilegal para la independencia de Cataluña, en la que los Mozos de Escuadra han desempeñado un papel esencial, el Boletín Oficial de la Generalitat de Cataluña publicó una serie de mejoras salariales de 300 euros para el año 2018.
Sin equiparación y sin pasarela
La Ley de Cuerpos y Fuerzas de Seguridad del Estado tiene prevista la creación de una «pasarela» que permita a los miembros de un cuerpo policial prestar servicios en otro diferente.
Esta previsión, que no se contempla en el caso de policías autonómicos que quieran incorporarse a la Guardia Civil, está sin desarrollarse. Precisamente, fruto de las tensiones y la manipulación política que se ha hecho evidente en los últimos días en Cataluña, entre 100 y 200 mozos de escuadra han reclamado por vía oficial a la Secretaría de Estado que activen esta posibilidad.
Desde la Unión Federal de Policía, Giraldo ratifica el diagnóstico: «El cuerpo de Mozos de Escuadra se ha politizado de una manera tremenda».
Sin embargo, no tiene empacho en reconocer el acierto de Interior al poner al segundo del destituido Mayor Trapero al frente de los Mozos. «Es un hombre fiel. Si ha prometido servir, va a servir. Tiene una trayectoria profesional impecable».
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