«España no se puede permitir esperar a Rajoy, ni mantener un Gobierno interino fracasado», por eso Pablo Iglesias, líder de Podemos, emplazó «a Pedro Sánchez a entablar un diálogo abierto a la ciudadanía» para formar un gobierno del cambio y reformista, y lo hizo después de ser recibido por el Rey Felipe VI.
Según Iglesias, a Felipe VI le ha parecido razonable la propuesta del líder de Podemos de sumar fuerzas Podemos, PSOE e IU, aunque seguramente, como reconocía el propio Iglesias, habrá muchos grupos que vean con buenos ojos esta propuesta y se puedan sumar. Sobre todo, porque la suma de PP y Ciudadanos es superior a la de IU, Podemos y PSOE, por lo que necesitarían el apoyo de los independentistas.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraLo fundamental para Pablo Iglesias, futuro vicepresidente del gobierno (se ha nombrado a sí mismo en ese puesto) es acabar con los desahucios, con la corrupción, con las puertas giratorias, el blindaje social y la proporcionalidad de la ley electoral, es decir, las medidas que mayor aceptación reciben en la sociedad. Y se comprometió a emprenderlas en los primeros 100 días de gobierno.
alusión a Cataluña: Sería necesaria una cartera que reflejase la plurinacionalidad de «este país» para defender la unidad nacional
Aunque también tuvo que reconocer que en un hipotético gobierno con Sánchez sería necesaria una cartera que reflejase la plurinacionalidad de «este país» para defender la unidad nacional, y destacó que esa cartera la tendría que liderar En Comú Podem, claro ganador de las elecciones en Cataluña. Lo cual abre la puerta a una apuesta independentista.
Líder en Derechos Humanos
En materia de política exterior dijo que quieren «un Ministerio de Exteriores que convierta a España en una potencia en la defensa de los Derechos Humanos», un mensaje pronunciado con el exjefe del JEMAD, José Julio Rodríguez (que no logró un acta de diputado en el 20D), posible futuro ministro de Defensa.
Al líder de Podemos le preguntaron qué había cambiado con respecto a las elecciones municipales para que ahora apoyase al PSOE, cuando además durante toda la campaña electoral insistió que no apoyarían a Sánchez porque no era de fiar.
Es más, el pasado mes de julio aseguró que su formación no entraría a formar parte de un gobierno presidido por otro partido político, y que él no aceptaría ser vicepresidente de Sánchez.
Su defensa para este cambio de postura fue que los cinco millones de votos que recibieron las fuerzas del cambio el 20D han creado un escenario diferente, y sobre todo, que no se fía del PSOE, como ya se vio «en la formación de la mesa pactada entre PSOE, Ciudadanos y PP». Por eso, como «garantía para el cambio», Podemos tiene que «ejercer responsabilidades de gobierno».
Una explicación que viene a decir que, el motivo por lo que antes no se podía pactar con el PSOE es ahora el motivo para hacerlo.
«En Interior nunca más un Ministro que se encomiende a la Virgen»
Más allá de su propuesta, con la que se ha adelantado a Sánchez, el líder de Podemos ha atacado el Partido Popular durante su rueda de prensa con comentarios como «en Interior nunca más un Ministro que se encomiende a la Virgen mientras recibe a corruptos en su despacho», en referencia al ministro Jorge Fernández Díaz y su reunión en su despacho con Rodrigo Rato cuando este estaba imputado.
Para Iglesias, el primer paso que tenía que dar para formar gobierno era comunicárselo al jefe de Estado (no pronunció la palabra rey en ningún momento), y una vez hecho pasar a llamar a Pedro Sánchez (que se reunía después con el Rey) y Alberto Garzón.
El tono de Pablo Iglesias fue firme, seguro, claro, y el estilo de exponer sus planes en la rueda de prensa posterior a su cita con el Rey, fue el de un hombre de Estado, que sabe muy bien lo que quiere y que comunica con claridad y convicción, a diferencia de Rajoy o Sánchez.
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