«No a los lácteos, no a la explotación de ninguna fémina, el consumo de lácteos es MACHISMO. Las vacas son compañeras». Con esta surrealista campaña, las simpatizantes del movimiento animalista, en su mayoría feministas, han protestado en Barcelona con el único propósito de que «se prohíba ordeñar a las vacas».
Desde primera hora del pasado domingo, varias feministas salieron a la calle en ropa interior, cubiertas de pintura roja y tubos de plástico colocados en los pechos imitando la extracción de lácteo.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEl argumento que poseían para querer que se prohíba ordeñar a las vacas fue que «nadie piensa en ellas como madres».
Las feministas se pintaron de rojo, empezaron a gritar y a simular ser ordeñadas
Ante el desconcierto de los transeúntes que pasaban por la avenida Puerta del Ángel de la ciudad Condal, las «defensoras de las vacas» se fueron desnudando y pintando con pintura roja. Pero el verdadero espectáculo llegó minutos más tarde, cuando comenzaron a gritar y a simular ser ordeñadas para solidarizarse con las vacas.
Los animalistas defienden que los seres humanos no pueden consumir un producto destinado exclusivamente para terneros
Las asociaciones en defensa de los animales llevan años denunciando la «crueldad» que supone el consumo de leche por parte de los seres humanos. Su argumento principal es que el hombre es el único animal que consume leche de otra especie y por lo tanto consideran que no se debería destinar al consumo humano un producto dirigido exclusivamente para terneros, según recoge La Gaceta.
El mensaje se recrudece entre otros de sus comprometidos activistas. Los hay que aseguran que la explotación de las vacas es un acto machista y las tratan como compañeras. “Feministas contra la explotación de nuestras compañeras”, es uno de los lemas que esgrimen estas asociaciones.
Feministas defienden a las vacas mientras piden la «libertad de las mujeres» para abortar
Éstas que defienden ahora la maternidad de las vacas, son las mismas que luchan por los derechos de las mujeres, unos derechos que se utilizan para abortar a millones de ninos al año. La campaña feminista afirma que «las vacas son sus compañeras» y que no van a permitir que esto siga ocurriendo, pero por el contrario apoyan y reafirman la idea de que se asesinen a millones de ninos en clínicas abortivas.
