Es la portavoz de Arran, el grupo radical que este verano está protagonizando acciones violentas contra el turismo en Barcelona y Palma de Mallorca. Se llama Mar Ampurdanès, tiene 21 años, y vive en un bonito chalé con piscina en un tranquilo pueblo de la capital catalana llamado Palau-solità i Plegamans.
La familia de la joven que se queja de los daños que el turismo provoca en su comunidad, se ha construido un modernísimo chalé de diseño en una exclusiva urbanización rodeada por cultivos y cerca del bosque.
Sin duda, la vida en este enclave al que no llega el turismo es más que apacible. Nada que ver con el mundo apocalíptico que Arran dibuja de las ciudades que reciben a muchos turistas.
En Palau-solità i Plegamans, en cambio, las piscinas, pistas de tenis y zonas verdes sólo las disfrutan los residentes que viven en esta zona privilegiada situada a 30 kilómetros de Barcelona.
La casa en la que vive la portavoz del grupo radical que ha desatado la ‘turismofobia’ en España es un chalé con piscina cercano a los 400.000 euros
Y es que una casa con jardín y sin piscina sale por unos 300.000 euros. La de Mar, que sí la tiene, llega hasta los 350.000 euros o 400.000 euros, según publica Crónica Global. Dato curioso es que Arran propone controlar el precio de la vivienda.
Expropiar PortAventura
Por ello a nadie le debe sorprender que el PIB por habitante del pueblo en el que viven los Ampurdanès es de 49.400 euros, casi el doble que la media regional, que se queda en 27.800 euros.
Pero la gran fobia de Arran es hacia el turismo, pues proponen la expropiación de PortAventura, el hotel vela de Barcelona o el centro comercial Las Arenas -antigua plaza de toros-.
No se andan con chiquitas estos chicos de Arran, que se lo pregunten a los turistas que iban en el interior de un autobús turístico en Barcelona o los que disfrutaban de su embarcación en el puerto de Palma de Mallorca. Ambos sufrieron el ataque de los radicales.
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