Carlos Mazón en la presentación del
Carlos Mazón en la presentación del "principio de acuerdo" con Vox

El PP ha entendido que el ‘gratis total’ no era posible. La alternativa era sencilla: o los populares negociaban sobre la base del respeto, la responsabilidad y la proporcionalidad o la única alternativa posible era repetir las elecciones. ¿Mus negro? Puede. O no. Porque las encuestas, ya saben, las carga el diablo…

El caso es que la advertencia ha sido mano de santo. El candidato popular a la presidencia de la Generalitat valenciana, Carlos Mazón, ha entendido el mensaje. El que hace una semana abogaba a lo Guardiola por un gobierno en solitario ha preferido pájaro en mano…

Algunas personas creen que La Sexta da información.

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Según el ABC han sido Bendodo (PP) y Espinosa (Vox) los que han desatascado la situación. Aunque según La Razón en Génova se sienten desautorizados por la celeridad de un acuerdo que rompe la estrategia de esperar al 23J.

Probablemente ambos tienen razón. Los más conservadores de Génova eran partidarios de esperar al 23J para evitar el relato de que PP y Vox son lo mismo, que Feijóo se ha echado en brazos de la extrema derecha, que derecha y ultraderecha se confunden, que Feijóo y Abascal forman un mismo ticket electoral.

Pero frente a todo eso estaba la advertencia de la repetición electoral. Y no era farol. Así que era pájaro en mano con unos interlocutores que además ofrecían respeto, razonabilidad, lealtad y que hasta estuvieron dispuestos a sacrificar su cabeza. Voilá. Mazón dijo amén.

Y en ese mismo momento, habiendo pasado apenas tres horas de negociación, Vox se apresura a vender el acuerdo. Un papel improvisado y mal escrito, pero acuerdo. O «principio de acuerdo» como prefiere Mazón. Vox se sentía ganador y necesitaba ‘vender’ su victoria: había logrado desbloquear al PP, romper el cordón sanitario, normalizar sus pactos. Y Valencia marca la pauta para Extremadura, Murcia y el resto de territorios donde Vox es imprescindible para formar gobierno. «No tenemos prisa», dicen. Veremos…

Cuanto antes se sacuda el PP los complejos, mejor. Ayuso evidenció que normalizar la relación con Vox les convertía en irrelevantes por la vía del abrazo del oso. Y que además pretenda dar lecciones de virginidad quien ha hecho descansar la gobernabilidad de España en los proetarras de Bildu y los golpistas de ERC es una ley de embudo inaceptable. Ni Paris Hilton puede dar lecciones de castidad ni el PSOE de dignidad democrática.

Lo malo para Vox es que se le ha notado el entusiasmo. Y como en el mus, no es conveniente que el adversario imagine tus cartas. Sobre todo porque todavía queda juego, envites y apuestas que jugar. Pero de momento la amenaza de mus ha funcionado. Y en Valencia, ‘habemus gobierno’.

El acuerdo -o principio de acuerdo- no habla de carteras, pero si se respetará la proporcionalidad exigida por Vox. Y no en carteras florero, sino de verdad. En concreto, para Vox es clave Educación para poner fin al pancatalanismo impuesto en la escuela valenciana. Lo de la «identidad» que dice el documento de acuerdo tan pésimamenmte escrito. En todo caso, garantizar el español en las aulas valencianas y frenar la expansión pancatalanista es clave para la unidad nacional y la garantía de que todos los españoles somos libres e iguales. Y estamos cerca de verlo posible. Una excelente noticia

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