El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, de visita en las fiestas de San Mateo y la Vendimia Riojana, en Logroño. EFE/ Raquel Manzanares

Europa Press. El secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, ha asegurado este martes que no gobernará «a cualquier precio» y, aunque ha evitado aclarar si tratará de hacerlo aunque no sea la fuerza más votada, ha insistido en que sólo lo hará si puede sacar adelante un programa socialista. Además, ha pedido a Ciudadanos que desvele si apoyaría al PP o al PSOE.

En una entrevista en la Cadena COPE, recogida por Europa Press, Sánchez ha defendido que esa capacidad de llegar a acuerdos con distintas formaciones políticas «a derecha y a izquierda» es «una de las fortalezas del PSOE», pero ha insistido en que esto no significa que vaya a gobernar «a cualquier precio».

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«Yo no voy a ser presidente del Gobierno a cualquier precio, yo aspiro a aplicar el programa que creo que es lo mejor para el país, que es un programa socialdemócrata, reformista, que modernice nuestro país», ha asegurado Sánchez.

En su opinión, España necesita «poner en marcha unos nuevos ‘Pactos de la Moncloa’ que tengan tres objetivos: la reforma de la Constitución, la modernización de la economía y la reconstrucción del Estado del Bienestar «castigado por la crisis y por los gobiernos de la derecha».

Y este será, ha dicho, su planteamiento para formar gobierno. Eso sí, no ha querido ponerse en la situación de que el PSOE sea la segunda fuerza más votada y ha insistido en que sale a ganar las elecciones del 20 de diciembre.

«No voy a ser presidente a cualquier precio»

Aunque, cuando se le ha preguntado por la situación en Portugal -donde los socialistas han rechazado liderar una alternativa de izquierdas al partido conservador de Passos Coelho- ha dado entender que él habría actuado como Antonio Costas, al subrayar que allí los hipotéticos socios de los socialistas defendían la salida de su país del euro.

Si eso se trasladara a España, ha dicho, él tiene claro que el PSOE es «un partido europeísta». En cualquier caso, en su opinión, «la gran lección» que hay que sacar de Portugal es que la izquierda, «cuando va fragmentada», lo que consigue es tener mayoría pero que gobierne la derecha.

Además, y en este debate, ha defendido que quien ya ha demostrado que gobierna a cualquier precio es, a su juicio, el líder del PP, porque «mintió a los españoles en su programa electoral» y se está investigando que «acudió dopado» durante 20 años a los procesos electorales. Él sí, ha recalcado, «ha hecho todo y de todo para poder llegar a La Moncloa».

«Yo no voy a hacer todo ni de todo. Yo no voy a ser presidente del gobierno a cualquier precio, sólo si puedo aplicar un programa socialista que es lo que necesita el país», ha remachado, insistiendo en que a lo que aspira es a ser la primera fuerza política. Y quien gane, ha dicho, es quien tendrá la responsabilidad de formar gobierno.

Respecto a Ciudadanos, ha apuntado que su «éxito» tiene «mucho que ver con los fallos del PP», por la corrupción y por la demanda de «regeneración política en el centro derecha» que no está colmando el partido de Mariano Rajoy. A su juicio, está creciendo «como consecuencia de un electorado de centro derecha que no se siente reconocido con el PP».

Pero, por eso, ha advertido a los votantes que apoyen a Ciudadanos en busca de un cambio político a partir del 20 de diciembre y les ha dicho que luego este voto puede transformarse en la continuidad de Rajoy como presidente del Gobierno.

A partir de aquí, ha apuntado que «está por ver» si el PSOE podrá llegar a acuerdos en el futuro, aunque ya lo están haciendo en algún lugar, como en Andalucía. Y ha insistido en que es el partido de Albert Rivera el que tienen que aclarar «si pactarían con el PP o con el PSOE».

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