El Comité Federal del PSOE celebrado el pasado fin de semana ha dejado más tocado aún el liderazgo de Pedro Sánchez al frente del partido. La reunión de los barones socialistas fue tan tensa como se esperaba. Los líderes regionales marcaron con claridad las líneas rojas al secretario general ante un hipotético pacto con Podemos que nunca podría cerrarse sin previa consulta al comité. Por eso el contraataque de Sánchez fue el de ‘podemizar’ el PSOE, es decir, consultar a la militancia sobre ese posible pacto para saltarse la autoridad del órgano del partido.
Los reproches se sucedieron desde el principio. Según la cadena Ser, la presidenta de Andalucía, Susana Díaz, recordó al secretario general que el 20-D el PSOE sacó el peor resultado de su historia. «No conseguimos ganarle las elecciones a un partido que tenía a sus espaldas la mayor brecha de desigualdad entre los ciudadanos y que tenía a sus espaldas los casos de corrupción seguramente más graves que hemos conocido en este país. Si el PP nos ganó estas elecciones en estas circunstancias es que no estábamos en el camino correcto».
La andaluza rechaza un pacto con Pablo Iglesias. «Un gobierno de coalición con Podemos no lo veo. No lo veo… No es el gobierno socialista».
El presidente de Asturias, Javier Fernández, no ve solución posible a corto plazo, por eso se inclinó por nuevas elecciones. «Creo honradamente y lo digo, y veremos cuáles son las propuestas si es que la dirección nos plantea una propuesta, pero yo tengo que pensar que va a haber unas próximas elecciones, lo tengo que pensar, lo pienso y lo digo».
‘El patíbulo definitivo’
Pero esa posibilidad quiere evitarla a toda costa el presidente extremeño, Guillermo Fernández Vara: «No podemos ir a unas elecciones. No nos iría bien y además creo que no le iría bien al país. Porque la ley de vasos comunicantes en la que hemos entrado hace que pudiera haber modificaciones, lo que gane uno lo pierda el otro y siga sin sumar. ¿Y qué le decimos a los españoles dentro de cuatro meses si después de otras elecciones seguimos sin sumar?».
Además el socialista extremeño rechaza cualquier pacto con los independentistas. «Si nosotros no dejamos claro que el PSOE no tiene nada que ver con el independentismo ni por activa ni por pasiva, a nosotros en Extremadura nos matan».
Eduardo Madina, que perdió las primarias ante Sánchez, también se mostró crítico: «Si sujetamos en el gobierno de España toda la arquitectura de ese gobierno sobre 17 tipos que la quieren partir, partiremos España y partiremos el PSOE».
Los hubo incluso que vaticinan el final del PSOE de seguir la senda podemita. El presidente de Aragón, Javier Lambán, mostró su preocupación: «Pedro Sánchez no puede ser presidente del Gobierno de España con el permiso de los independentistas porque eso, compañeras y compañeros, no sería un gobierno socialista sino que sería el patíbulo definitivo del PSOE. Nos queda ir a otros caladeros de posibles acuerdos en fuerzas políticas de la derecha dispuestas a programas reformistas como puede ser el PNV o Ciudadanos».
La corrupción sigue acechando al PP
Pero las cosas no están mucho mejor en el Partido Popular. Todos los concejales y asesores del PP (excepto los cuatro que declararon como testigos) en el Ayuntamiento de Valencia han sido citados en calidad de imputados -«investigados» según la nueva Ley de Enjuiciamiento Criminal- por lavar presuntamente la caja B de la ex alcaldesa, Rita Barberá.
El PP ya ha hablado sobre estos presuntos casos de corrupción a través del presidente del PP vasco, Alfonso Alonso, que ha defendido el papel del Gobierno y de Mariano Rajoy en los últimos años. «El Gobierno ha garantizado que los instrumentos del Estado pudieran actuar contra la corrupción y que toda la corrupción aflorara».
Por otra parte, Alonso ha asegurado que «la corrupción va aflorar, está aflorando, los corruptos van a pagar y, por tanto, quedarán fuera». «Es lo que estamos viendo, quizás otros no hicieron lo mismo, pero eso es lo que estamos viendo que ha ocurrido estos años en España», ha reiterado.
Preguntado si incluye entre los presuntos corruptos de su partido a la exalcadesa de Valencia Rita Barberá, Alonso no incluye «a nadie, y no debería». «Nosotros apoyamos lo que pongan encima de la mesa la policía, los fiscales o lo jueces, que son los que tienen que hacer la limpieza de la corrupción en España».
Felipe VI reabre la ronda de contactos con los candidatos
En realidad la cuestión de la que todos hablan en el PP es sobre figura de la posible sucesión de Rajoy. En público, por supuesto, nadie se atreve a discutir al líder. El ministro de Justicia, Rafael Catalá, ha asegurado que en su partido está claro que el presidente del Gobierno en funciones es «quien debe liderar el partido, el Gobierno y quien tiene que someterse, cuando sea posible, al debate de investidura».
Al mismo tiempo el titular de Justicia cree que el debate de investidura «no es un debate político», sino un debate para obtener el apoyo de la Cámara. «Lo que el presidente Rajoy puso de manifiesto hace nueve días a su majestad el Rey es que no contaba en ese momento con los apoyos suficientes para garantizar la investidura y que seguía trabajando en ello, y en eso estamos», ha subrayado.
Durante la mañana del lunes se han vuelto a iniciar la ronda de contactos con el Rey para designar un candidato a la presidencia del Gobierno. Uno de ellos ha sido Albert Rivera, que ha pedido este lunes a los líderes del PP y del PSOE, que abandonen el tacticismo e intenten abanderar la negociación de un Gobierno, para lo cual les ha urgido a abrir esta misma semana una mesa de negociación para poner en marcha el procedimiento con un candidato y una fecha de investidura.
Así lo ha puesto de manifiesto Rivera en la rueda de prensa posterior a la reunión de hora y diez minutos que ha mantenido con Felipe VI. El dirigente de la formación naranja ha mostrado su deseo de que Rajoy o Sánchez «deshojen la margarita» ante el Rey, con el que tienen previsto reunirse este martes, y revelen cuanto antes si van a intentar negociar un Ejecutivo o bien «asumir que no pueden gobernar». «No tenemos tiempo que perder», ha enfatizado.
En Comú-Podem cuenta con Pedro Sánchez
A su juicio, no se puede prologar durante más tiempo «el vacío de sentido común y de sentido de Estado», sino que hay que sentarse ya a «trabajar», y así tiene intención de hacerlo Ciudadanos con PP y PSOE, sobre las reformas que necesita el país para avanzar hacia un Gobierno de transicion. «Hace falta salir del tacticismo y entrar en una fase de negociación intensa, necesaria y fructífera», ha manifestado.
El diputado de En Comú-Podem en el Congreso, Xavier Domènech, ha afirmado que un gobierno del PSOE con Ciudadanos no sería una alternativa asumible para su formación. «Una alternativa del PSOE con Ciudadanos no responde para nada a aquello que expresamos nosotros», ha argumentado.
Sin embargo, ha remarcado que no sería una alternativa asumible porque no representa lo que expresa su formación. «Pero estamos adelantando escenarios que no se han dado ni se han construido, nadie ha hablado», ha añadido.
Preguntado por si el candidato propuesto por el Rey debería ser el presidente del Gobierno en funciones, Mariano Rajoy, o el secretario general del PSOE, Pedro Sánchez, el diputado ha dicho que desde En Comú ya se propuso «una alternativa que pasa por construir una alianza en la que estuviera Pedro Sánchez«, pero a día de hoy «no está en condiciones de garantizar» su apoyo porque aún «no ha habido ninguna conversación».
Además, ha llevado a Zarzuela la misma propuesta que llevó en la pasada ronda de contactos. «La alternativa que planteamos pasa con un pacto PSOE-Podemos y las confluencias, es la alternativa que se debe trabajar», ha subrayado.
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