Por primera vez el CIS da como vencedor a Feijóo. Sin embargo, no suma mayoría absoluta con Vox. Sin embargo, PSOE con Sumar si alcanzarían los 176 diputados necesarios. El mensaje es claro: el bloque progresista puede formar gobierno sin las hipotecas de los bilduetarras ni los ‘rufianes’ de turno. Voilá.
Tezamos es como el kamikaze que se extraña de que todo el mundo vaya en dirección contraria. Pero la realidad es que todos los sondeos auguran una mayoría absoluta PP+Vox. Ajustada. Muy ajustada en algunos casos. O rozándola en otros. En todo caso, como siempre, la encuesta que la vale son las urnas.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraPero lo de Tezanos es una buena muestra del coste reputacional e institucional de tomar el asalto las instituciones. El ‘cambiacolchones’ lo ha hecho con todas: con el CIS, el INE, la Abogacía del Estado, la Fiscalía, el Constitucional y lo que se le ponga por delante.
Por eso Feijóo ha propuesto una ley que obligue a un ‘barbecho’ de al menos 5 años a los políticos que opten a un cargo público. Salud democrática. Como la nueva ley del Tribunal Constitucional y el anuncio de mil nuevos jueces y fiscales. Eso como guiño para los reformistas de Ciudadanos que todavía queden ‘anaranjados’.
Para los de Vox también hay guiños: recuperar el delito de sedición y de convocatoria de referéndums ilegales para cortocircuitar el «lo volveremos a hacer» de los secesionistas. Además, plan antiokupas para poder desalojar en 48 horas. ¡Urge!
Y para los tecnócratas promete prolongar la vida útil de las centrales nucleares, deflactar la tarifa del IRPF para las rentas más bajas y eliminar el impuesto de las grandes fortunas. Las clases medias, de nuevo emparedadas y ‘paganinis’ del estado de bienestar.
Pero lo más relevante de los anuncios de Feijóo es que normaliza la relación con Vox: se puede negociar y gobernar porque respetan la Constitución. Y por si no se había entendido, ‘mata’ a Guardiola y censura que fuera «visceral y poco racional» en su relación con Vox. ¡Casi nada!
Es verdad que también afirma que ofrecerá un pacto de Estado en Vivienda, Violencia de Género y agua. Y que hablará con los barones para que el PSOE facilite su investidyura sin hipotecas. Pero integra a Vox en una ecuación. Quizás porque sea verdad lo que dicen las encuestas: que resultará diezmado. O quizás porque las experiencias de los pactos no les ha resultado tan honerosa.
Salvado el escollo extremeño queda ahora el murciano. López Miras tensa la negociación afirmando que si Vox bloquea en Murcia lo puede hacer en España. Voto útil en vena. Una trifulca que amenaza en convertirse en un Guardiola 2.0 que amenace gravemente la alternativa al sanchismo. ¿Se arriesgará a que Feijóo le ‘asesine’ políticamente en la plaza pública como ha hecho con Guardiola?
Por lo demás:
- Puigdemont, a prisión. El Tribunal Europeo de Justicia de Luxemburgo ha resuelto retirar la impunidad parlamentaria al ex presidente catalán, Carles Puigdemont. De esta manera se acerca la posibilidad de extradición para ser juzgado en España.
- Francia fallida. A Macron le cuesta reconocer el fracaso del multiculturalismo y le cuesta más declarar el estado de excepción. Es evidente que el fenómeno de estado fallido llegará a España más pronto que tarde. Los policías y Vox advierten. La prensa les acusa de islamofoibia. La misma película que en Francia hace 10 años.
- Empleo. El gobierno presume del récord de 20,87 millones de empleos, cerca de los 21 millones. Buena noticia si no fuera porque el número de horas trabajadas no crece. O dicho de otra manera: no hay más empleo sino que el que hay está más repartido. Es decir: precarización laboral.
