Es la primera vez que EEUU ataca a Siria tras estallar la guerra civil en el país hace seis años. Ocurrió la madrugada de este viernes, cuando su Marina lanzó 59 misiles de crucero Tomahawk, cada uno con una carga explosiva de 500 kilos, sobre la base aérea de al-Shayrat, situada en las afueras de la ciudad de Homs.
Los misiles fueron lanzados desde los destructores Ross y Porter, que tienen su base en Rota, en la provincia de Cádiz, según explican las páginas web oficiales de ambos navíos.
Antes de producirse el ataque el presidente estadounidense, Donald Trump, como su secretario de Estado, Rex Tillerson, declararon que el presidente sirio, Bashar Asad, debía dejar el poder. Se trata de un cambio de 180 grados en la política del Gobierno de Trump, que en los 19 meses de campaña aseguró que iba a sacar a EEUU de las guerras de Oriente Medio y que la agresividad de su rival Hillary Clinton en Siria amenazaba «con desatar la Tercera Guerra Mundial», según ha informado El Mundo.
En 2013, Trump ya se opuso a los planes del expresidente estadounidense Barack Obama para atacar a Siria. El motivo del bombardeo, que al final no se produjo, era exactamente el mismo por el que Trump ha atacado ahora: el uso de armas químicas por parte del régimen de Asad contra la poblacion civil en la guerra civil del país.
El gobernador de Homs ha afirmado que «el ataque con Tomahawk cumplió con lo que Daesh – Estado Islámico – y Al Qaeda han intentado lograr contra el ejército sirio durante años».
Trump confirma el ataque
Trump ha confirmado que dio la orden para atacar una base militar en el oeste de Siria, afirmando que la decisión va en línea «con el interés nacional», al tiempo que ha pedido a las «naciones civilizadas» que se unan a Washington «para intentar poner fin a la carnicería y el derramamiento de sangre en Siria».
«He ordenado un bombardeo contra la base aérea siria desde donde se llevó a cabo el ataque químico», en relación al bombardeo del 4 de abril en la localidad de Jan Sheijun, en la provincia de Idlib (norte), que dejó cerca de un centenar de muertos.
Trump asegura que lo ha hecho «en defensa del interés nacional y para evitar la difusión de armas químicas mortales»
El mandatario ha indicado que lo ha hecho «en defensa del interés nacional y para evitar la difusión de armas químicas mortales», recalcando que «no puede haber dudas de que Siria usó armas químicas prohibidas».
Por el momento no hay informaciones sobre víctimas del ataque, si bien estas fuentes han detallado que el objetivo eran los aviones que se encontraban estacionados en la base, así como su pista de despegue.
Putin califica el ataque de «agresión a un Estado soberano»
Por su parte, el presidente de Rusia, Vladimir Putin, ha descrito este viernes el ataque como una «agresión a un Estado soberano». «Putin considera los ataques estadounidenses a Siria como agresión a un Estado soberano, en violación de las normas del Derecho Internacional y, encima, bajo un pretexto inventado», ha afirmado el portavoz del Kremlin, Dimitri Peskov.
Asimismo, ha destacado que el ataque es «un intento de desviar la atención de las numerosas víctimas civiles en Irak», agregando que «causan un deterioro a las relaciones» entre Estados Unidos y Rusia, según ha informado la agencia rusa de noticias Sputnik.
Peskov ha dejado claro que el ataque contra la base militar del régimen que preside Bashar al Assad causa un fuerte daño en las relaciones entre Rusia y Moscú. «Esta acción de Washington perjudica sustancialmente las relaciones ruso-estadounidenses cuyo estado ya de por sí es lamentable», ha asegurado.
El portavoz de Putin ha hecho hincapié en que esta acción «no acerca a la meta en la lucha contra el terrorismo internacional sino, por el contrario, se erige en un obstáculo serio para crear una coalición internacional que pueda combatir eficazmente este mal global, algo que el presidente de EEUU, Donald Trump, por cierto, había proclamado como una de las tareas prioritarias durante su campaña electoral».
Rusia ya ha anunciado que Moscú pedirá una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU tras el ataque
El Departamento de Defensa ha asegurado que «como siempre, tomó medidas extraordinarias para evitar víctimas civiles» en el ataque.
El presidente del Comité de Defensa de la cámara alta del Parlamento de Rusia, Victor Ozerov, ya ha anunciado que Moscú pedirá una reunión urgente del Consejo de Seguridad de la ONU tras el ataque.
En sus declaraciones, ha sostenido que el ataque «puede ser considerado como un acto de agresión por parte de Estados Unidos contra un país miembro de la ONU».
Es la primera vez que la Casa Blanca ordena una acción militar contra las fuerzas gubernamentales en Siria.
Comentarios
Comentarios