El presidente Donald J. Trump ha publicado una nota este 16 de enero, Día de la Libertad Religiosa en EEUU -conmemoración de 232 aniversario de su reconocimiento por el estado de Virginia- en favor de aquellos que sufren el laicismo imperante en el país.
En un comunicado emitido por la Casa Blanca, el presidente defiende a los que la ley ha sancionado por mantenerse fieles a su fe a pesar de contradecir la ley.
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Suscríbete ahoraHa recordado la historia el significado de este día, en el que «nuestros antepasados, buscando refugio de la persecución religiosa, creían en la verdad eterna de que la libertad no es un regalo del gobierno, sino un derecho sagrado de Dios Todopoderoso».
«En los faldones de la Revolución Americana, el 16 de enero de 1786, la Asamblea General de Virginia aprobó el Estatuto de Libertad Religiosa de Virginia. Este proyecto de ley seminal, escrito por Thomas Jefferson, declara que, ‘todos los hombres serán libres de profesar y sostener sus opiniones en asuntos de religión, y de que los mismos no disminuirán, agrandarán ni afectarán a sus intereses civiles'».
Esa declaración fue el germen de la Primera Enmienda, sustento de varias libertades fundamentales, entre ellas la religiosa.
Trump:»Ningún estadounidense, ya sea una monja, una enfermera, un panadero o un empresario, debería verse obligado a elegir entre los principios de la fe o la adhesión a la ley»
Esa libertad tan querida por los padres fundadores está en peligro, advierte Trump, que pone como ejemplo casos reciente de cristianos castigados por la justicia por negarse a realizar actos que van contra su fe religiosa.
«Ningún estadounidense, ya sea una monja, una enfermera, un panadero o un empresario, debería verse obligado a elegir entre los principios de la fe o la adhesión a la ley», dice Trump en referencia a las monjas obligadas a pagar anticonceptivos, o al panadero sancionado por no querer hacer una tarta gay.
«El libre ejercicio de la religión es una fuente de estabilidad personal y nacional, y su preservación es esencial para proteger la dignidad humana. La diversidad religiosa fortalece nuestras comunidades y promueve la tolerancia, el respeto, la comprensión y la igualdad. La fe respira vida y esperanza en nuestro mundo. Debemos cuidar diligentemente, preservar y apreciar este derecho inalienable», concluye el presidente de EEUU.
En base a todo lo expuesto, a partir de este 2018 Trump ha proclamado el 16 de enero de 2018 como el Día de la Libertad Religiosa y pide «a todos los estadounidenses que conmemoren este día con eventos y actividades que nos recuerden nuestra herencia compartida de libertad religiosa y que nos enseñen a asegurar esta bendición tanto en nuestro país como en el extranjero».