“Para todos los miembros que participan en nuestras campañas más esenciales, quiero tomarme un tiempo y mostrar lo que hacemos con los donativos hechos a nuestra organización”, así comienza a explicar el presidente de Hazteoir.org, Ignacio Arsuaga, cómo se financia la asociación y su plataforma internacional, CitizenGO.
“Todo es gracias a la generosidad de los que nos apoyan. De esta manera somos capaces de continuar nuestro trabajo en defensa de la vida, la familia y la libertad”, añade Arsuaga. Además, no duda en mostrar públicamente las cuentas en lo que supone un ejercicio de transparencia absoluta.
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Además, Arsuaga destaca que dedican el 84,36% de sus ingresos a llevar a cabo campañas ciudadanas. «Todos nuestros ingresos provienen de personas que apoyan CitizenGO día tras día. No recibimos subvenciones de ningún gobierno ni ningún patrocinio de ninguna gran empresa (no las pedimos porque no las queremos). Esto nos permite ser plenamente independientes y libres en nuestras acciones y campañas», afirma.
«Nuestros ingresos derivan exclusivamente de la generosidad de ‘citizenGOers’ de todo el mundo que donan lo que consideran apropiado para sostener nuestras campañas», insiste el presidente de HazteOir.org.
En cuanto al éxito de las campañas de ambas plataformas, Arsuaga asegura que han conseguido mucho. «Hemos ganado muchas batallas en esta ‘guerra cultural’, durante el 2019 enviamos cerca de 727.400.000 emails para defender la vida, la familia y la libertad en todo el mundo», agrega.
Campañas 2019
«Gracias a la generosidad fuimos capaces de desarrollar varias campañas de gran impacto en el 2019, como nuestra campaña para defender a los no nacidos en Naciones Unidas o contra el adoctrinamiento LGTB de Disney», recuerda Arsuaga.
«También dimos una gran batalla para darle una oportunidad a la pequeña Tafida que hoy, gracias a Dios, se encuentra mejorando. Frenamos la publicación de un cómic blasfemo y logramos que la anterior asamblea de la OEA no avanzara en su agenda proabortista. En la cumbre de Nairobi del pasado mes de noviembre logramos romper el pretendido consenso por el aborto. Y después de muchos años logramos la liberación de Asia Bibi, la cristiana pakistaní acusada falsamente de supuesta blasfemia, en el corredor de la muerte por años…», enumera el presidente de HazteOir.org.
Y concluye con una reflexión: «Creo firmemente que hicimos el mejor uso de los recursos que las personas confiaron generosamente a CitizenGO. Porque no queremos hablar sobre cambiar el mundo sino que queremos cambiarlo realmente. Como siempre, muchas gracias por todo lo que hacen a los voluntarios. Sin ellos, CitizenGO no existiría».
