El hecho de que según los últimos datos cerca del 85% de la población española utilice smartphones muestra la ola de consumo que se genera en la población.
Ese uso generalizado implica un gasto elevado para las familias y en general una presión social muy grande para que los hijos dispongan de lo mismo que el resto de gente de su edad.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraLa organización combinada de Intrum Justitia y Lindorff, compañía líder mundial en gestión de crédito, han publicado un Informe Europeo de Pagos de Consumidores que muestra cómo los padres españoles son vulnerables a la presión social, lo que les hace gastar en ocasiones más dinero del que pueden gastar para sus hijos.
Según este informe que publica el diario ABC el 40% de los padres españoles ha experimentado esa presión durante el último año. Esto ha provocado que compren productos o servicios que no pueden pagar.
El ordenador (26%), el móvil (25%), los zapatos (23%), las consolas y videojuegos (21%), la ropa de marca (21%) o los viajes (18%), los que más presión generaN
De estos, el 91% han actuado a raíz de esa presión y han comprado ese producto o servicio inalcanzable. Este dato se sitúa por encima del 87% de media europea.
Como consecuencia, las finanzas familiares se resienten y pueden conllevar un endeudamiento a largo plazo.
Por franja de edades, los padres que más sienten esa presión social son los jóvenes. Los padres de 18 a 24 años, el 80% reconoce haber sentido esa presión. Ese porcentaje se reduce en la franja entre los 25 y los 34 años donde sólo el 60% reconoce sentirse presionado para consumir más de lo que pueden.
Sólo el 38% de los padres de entre 35 y 49 años tienen esa percepción y de los mayores de 50%, sólo el 22% se deja influenciar.
De entre los productos que conllevan esa presión social, el ordenador y los teléfonos móviles son los productos más comunes.
Según revela el estudio, el 26% de los progenitores de España ha comprado alguna vez un ordenador para sus hijos que estaba fuera de sus posibilidades económicas, algo que también ha ocurrido al 25% quienes han comprado un móvil para sus hijos.
Otros productos que los padres encuestados compran presionados aun cuando no tienen dinero para ello son los zapatos (23%), las consolas y videojuegos (21%), la ropa de marca (21%) o los viajes (18%).