No incluye profesores que vengan del mundo de la salud, pero si de la Psicología, la Comunicación, la Educación, la Economía, el Derecho o la Antropología. Catedráticos de hasta ocho facultades distintas van a participar el próximo curso en el nuevo grado de ‘Estudios de Género’ de la Universidad Autónoma de Barcelona (UAB).
Tendrá una duración de tres años, es decir, de 180 créditos, en el que los alumnos estudiarán asignaturas como Historia del Feminismo Occidental, Derecho Antidiscriminatorio, Lengua y Género o Construcción Psicosocial de las Identidades y las Diversidades, entre otras.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEn su web, la Universidad explica que este nuevo grado va dirigido a personas que «deben comprender que las desigualdades por razones de género y de sexualidad no son un asunto exclusivo de unos colectivos concretos, sino una cuestión de derechos humanos y de justicia, en el contexto de nuestra tradición cultural, aunque cargada de estereotipos y prejuicios que hay que desmontar».
Joan Carbonell, decano de la Facultad de Filosofía y Letras, puntualiza a Actuall que se trata de desmontar «estereotipos de origen machista».
Carbonell: «Había una necesidad social en relación a la formación de personas que supieran implantar las políticas de género en las empresas, en las instituciones públicas…»
«Hay una serie de problemas asociados al género y al sexo, que en principio no es muy difícil saber de lo que hablamos, porque está saliendo continuamente en la prensa», explica.
Asimismo, Carbonell señala que la idea es «promover estos estudios para formar profesionales que sepan tratar este tipo de problemas asociados a todo lo que es el género y el sexo, desde una perspectiva académica» debido a que en España «había una necesidad social en relación a la formación de personas que supieran implantar las políticas de género en las empresas, en las instituciones públicas…».
Una visión «transversal»
En la presentación del grado se especifica que el programa «proporciona al alumnado una visión transversal del funcionamiento del sistema binario de género y del ejercicio del poder que se sostiene».
Actuall ha preguntado al decano de la facultad en la que se cursará la nueva carrera si dar una visión transversal sobre este asunto echa por tierra lo que ha dicho hasta el momento la Biología. Y aquí llegan los nervios. Carbonell responde: «Yo soy de estudios clásicos, si quiere hablar de temas concretos debería ponerse en contacto con personal especialista. Esto no me lo pregunte más porque no tengo elementos para responderle».
«Yo soy el responsable de la Facultad que organiza estos estudios, no soy experto en la materia», afirma de manera tajante.
«Si usted llama al Departamento de Comunicación preguntando por el responsable de estos estudios le van a pasar conmigo, porque yo soy el responsable de organizarlos, pero yo no soy especialista en esto», reitera Carbonell, para a reglón seguido rematar que «él no puede responder a cosas esenciales del grado».
En la misma conversación, asegura: «Hasta el momento me derivaban a mí a los periodistas porque preguntaban por las razones por las que se crea la carrera y esto yo sí lo he podido responder».
Al parecer los medios interesados en este nuevo grado nunca han preguntado al decano de la Facultad de Filosofía y Letras, responsable de la carrera Estudios de Género, sobre aspectos tan profundos como éstos, sino que se limitaban a seguir el esquema de lo políticamente correcto.
