El abandono de la familia española por parte de la Administración está provocando el agravamiento de sus indicadores, según el informe ‘La Protección Social a la Familia en España 2015‘ publicado este martes por el Instituto de Política Familiar (IPF).
«Con estos análisis queremos dar respuesta a un doble desafío: en primer lugar, que se disponga de la máxima información acerca de la situación real y la problemática de temas como políticas de familia, vida, conciliación. Y por otra parte, generar una serie de propuestas y alternativas que consideramos fundamentales para afrontar la problemática de la familia», asegura el presidente del Instituto de Política Familiar, Eduardo Hertfelder.
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Suscríbete ahoraAdemás, añade que la primera conclusión de este último informe es que «se lleva 35 años de desprotección a la familia, que ya son demasiados y ya es hora de que en España superemos el absurdo histórico de que ninguna Administración Pública se ocupe de apoyar a la familia».
Los principales datos de este estudio son los siguientes:
- El reconocimiento de las funciones sociales de la familia y su protección social a la familia constituye un derecho fundamental reconocido tanto a nivel nacional como internacional. Los indicadores de protección social a la familia analizados constatan que España tiene una deficiente protección social a la familia. Además, la crisis económica ha acentuado esta divergencia con Europa.
- Las prestaciones dadas a la familia no cubren sus necesidades más básicas. Europa ofrece de media casi el doble que España en €/habitantes/año. Y esta diferencia se acrecienta cada vez más. Mientras que en 2005 la diferencia con Europa era de 221€ por habitante /año, en el 2013 es de 266.
Una familia española donde ambos cónyuges tuvieran unos ingresos equivalentes al Salario Mínimo, no tendría derecho a esta prestación por superar el límite de renta familiar
- La prestación social a la familia no es prioritaria para las administraciones con respecto a otras prestaciones sociales. Esta situación se ha agravado desde 2008 y ha provocado que España apenas destine el 5,2% de todas las prestaciones sociales a la familia. De hecho, en la actualidad, de cada 19 euros que destina en España a gastos sociales, tan sólo un euro se dedica a la familia.
- El PIB destinado a la familia no asciende del 1,3%. Una cifra que aleja a España de la media europea con un 2,1%. Además, en apenas cinco años el PIB ha mermado en más del 11% pasando del 1,47% en 2009 al 1,31% en 2013. Por otro lado, de este 1,31% del PIB , el 0,50% son prestaciones en dinero.
- La familia española está discriminada no sólo en la cuantía de ayudas, sino también en la edad de los hijos que se pueden beneficiar. En el caso de España son los 18 años y en la UE son 25 años.
- La falta de revalorización anual de las prestaciones denota falta de voluntad por parte de las Administraciones. Incluso ha sufrido un agravamiento durante la crisis con una devaluación del 12% en apenas tres años.
- La familia española cuenta con unas reducidas ayudas directas a la familia y con grandes restricciones para poder acceder a ellas. Las familias españolas tienen cuatro ayudas directas y todas ellas con restricciones que la hacen inviable para la mayoría de las familias.
- Es el país de la Unión Europea que da menos ayuda por hijo. En Europa la prestación por hijo a cargo es de 91 €/mes de media (y en la UE15 es de 107 €/mes), en España, sin embargo, es tan sólo de 24 euros.
Una familia española necesitaría tener 8 hijos y ganar menos de 30.000 euros al año para tener las mismas prestaciones que una familia en Alemania con 2 hijos y sin límites de ingresos
Para Hertfelder todas estas conclusiones no sólo «demuestra que la familia no es una prioridad para las Administraciones», sino que también «provoca que España esté en el furgón de cola de toda la UE en cuanto a protección y ayuda a la familia».
