Las evidencias científicas son claras y las investigaciones dan una y otra vez duros varapalos al lobby LGTBI, que ve cómo los científicos desmontan sus argumentos, motivo por el cual están presionando a los políticos para que promuevan leyes que limiten la libertad de expresión de todo aquel que discrepe de ellos.
El último ejemplo de estas evidencias es el estudio publicado en el European Journal of Epidemology y que rompe ciertos mitos difundidos por los grupos homosexualistas. La conclusión a la que llegan los investigadores es que los homosexuales que se casan entre sí o que viven en una denominada “relación de compromiso” son casi tres veces más propensos al suicidio que los heterosexuales que tienen estas mismas relaciones.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraAdemás, los investigadores insisten en que estos datos se cumplen no ya en países donde viven un estigma social “incluso en un país con un clima con respecto a la homosexualidad comparativamente tolerante como Suecia”.
El país escandinavo es uno de los países más tolerantes y con mayor aceptación de la homosexualidad. Incluso la Iglesia oficial del Estado, de carácter protestante, está presidida por una mujer obispo abiertamente lesbiana. Es precisamente en Suecia donde los que sufren más presión son los que informan sobre estudios como éste o cuestionan los postulados de este potente lobby.
Los miembros en los matrimonios homosexuales tienen 2,7 veces más probabilidades de suicidarse que los integrantes del matrimonio natural
El estudio indica que los miembros en los matrimonios homosexuales tienen 2,7 veces más probabilidades de suicidarse que los integrantes del matrimonio natural siendo más alto además el riesgo entre los hombres que entre las mujeres.
Esta investigación titulada, El suicidio en las parejas casadas de Suecia, ¿es mayor el riesgo en las parejas del mismo sexo?, tomó los datos de la base de datos del gobierno de Suecia y comparó una muestra de 6.000 parejas homosexuales casadas.
Los resultados que se extraen son muy similares a otros realizados en Holanda, el país del mundo con mayor aceptación de la homosexualidad, y en estos se ha mostrado que entre los homosexuales existe tasas significativamente más altas de trastornos en el estado de ánimo, ansiedad, abuso de sustancias, trastornos de alimentación, episodios de pánico e intentos de suicidio.
Y es que tanto esta última investigación como otras también recientes muestran una fuerte relación entre la conducta homosexual y una serie de resultados psicológicos negativos, también en los países favorables al mundo gay.
La conclusión es que los problemas que en muchas ocasiones tienen los homosexuales no tienen una relación tan grande con la “homofobia” tal y como vende el lobby LGTBI pues las altas tasas de suicidio se dan igualmente en países gay-friendly pues tienen más que ver con la conducta que con el entorno.