La pastelería ‘Ashers’ de Irlanda del Norte que fue condenada por la Corte Superior de Belfast a indemnizar con 500 libras por daños (discriminación) a un cliente que solicitó una tarta con el eslogan «Apoya el matrimonio gay», está ahora de enhorabuena.
Daniel y Amy McArthur, el matrimonio cristiano dueño del establecimiento, han incrementado sus beneficios de manera exponencial. Si en 2015 obtuvieron 1,5 millones de beneficios, en 2016 han ganado 200.00 euros más, hasta 1,7 millones euros.
Los pasteleros recurrieron el pago de la multa ante la Corte de Apelaciones. Pero perdieron el caso ante el tribunal después del fallo de la Comisión de Igualdad que encontró que había discriminado al cliente que pidió la singular tarta.
El matrimonio alegó que no tenían nada contra esa persona, pero que el mensaje les parecía incompatible con sus valores
De poco le sirvió al matrimonio alegar que no tenían nada contra esa persona en concreto, sino que el mensaje les parecía incompatible con sus valores. Nada más.
Esta decisión, lejos de perjudicar el negocio, ha beneficiado a la empresa, ya que la respuesta de los ciudadanos de Belfast ha sido la de apoyar al matrimonio McArthur.
La cadena de pastelería de Irlanda del Norte, que ahora cuenta con siete puntos de venta en todo el país, fue fundada por Daniel y Amy, el joven matrimonio.
La firma, que emplea a casi 80 personas y hace entregas en todo el Reino Unido e Irlanda ha pasado del 1,5 millones de ganancias a los 1,7 millones de euros.
Te puede interesar:
Amenazas, multas, cierres de locales e incluso incendios… así es la cristofobia del lobby LGTBI
Comentarios
Comentarios