El cardenal guineano Robert Sarah se ha convertido en uno de los principales defensores de la familia y el matrimonio ante los ataques que sufre en el mundo de hoy. Ya lo hizo en el Sínodo de la Familia así como en numerosas entrevistas donde también ha denunciado el «colonialismo ideológico» que se pretende realizar en África.
En una conferencia ofrecida durante el Desayuno Nacional Católico de Oración, en Washington DC, el cardenal Robert Sarah ha afirmado que «el maligno intenta destruir a la familia» y que para evitarlo, los cristianos deben luchar contra las ideologías que niegan la importancia de que los ninos tengan un padre y una madre.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEl cardenal Sarah aseguró que el mundo se encuentra «cada vez más distanciado de Dios a causa del colonialismo ideológico».
Según ha informado Infocatólica, en el discurso se abordaron diferentes temas, como la persecución religiosa, la falta de cuidado a los ancianos o la impasibilidad «ante los pobres y los más desvalidos». Sin embargo, el cardenal guineano prestó especial atención al peligro que corre la familia.
Citando al papa san Juan Pablo II, Sarah afirmó que es en la familia donde el Evangelio se predica por primera vez. «El amor responsable y generoso de los cónyuges, que presenciamos en el sacrificio de los padres que acogen y crían a los hijos como una dádiva de Dios, hacen el amor visible a nuestra generación».
El cardenal recalcó que el divorcio, la cohabitación y el matrimonio homosexual «causa daño a los pequeños infundiendo en ellos una profunda duda existencial acerca del amor. Son un escándalo, aparte de ser un obstáculo que impide a los más vulnerables creer en tal amor»..
El prelado africano señaló que legalizar estas situaciones, como se ha hecho en muchos países, no resuelve los problemas sociales y considera que es muy necesario luchar para «defender a la familia».
El cardenal también recalcó que las restricciones a la libertad religiosa equivalen a la persecución violenta. «La violencia contra de los cristianos no es únicamente física, puede ser también política, ideológica y cultural», dijo y añadió que «este tipo de persecución es igualmente dañina a pesar de que es menos visible».