No es ningún secreto la aversión que Hillary Clinton siente hacia los católicos. Sus reiteradas declaraciones contra los cristianos estadounidenses revelan que concibe a la Iglesia católica y a los creyentes de fe cristiana un obstáculo a la agenda del Nuevo Orden Mundial que pretende imponer la Ideología de Género y la cultura de la muerte.
Algunas de sus declaraciones más agresivas se han referido al aborto o a las creencias de los cristianos: «Los bebés en el vientre no tienen derechos constitucionales»; «Los cristianos usan sus creencias para agredir a los ciudadanos gays y lesbianas» son algunas de las frases que revelan la animadversión de Hillary hacia los cristianos.
También arremetió Clinton contra la libertad religiosa, principio que no es que cuestione, sino que pretende erradicar en favor de la ideología de género. «Tenemos que cambiar las creencias religiosas y las estructuras de parcialidad».
Además de las palabras hostiles, Clinton ha propuesto cercenar la libertad religiosa en todo el país y una ley de aborto libre que incluye el aborto por nacimiento parcial, es decir, decapitar al bebé en medio del parto.
Planned Parenthood financió con 50 millones a Clinton
Por supuesto, todas estas propuestas han recibido el apoyo del gigante del aborto, el lobby Planned Parenthood, que invirtió 50 millones de dólares en la campaña de la candidata demócrata.
Por el contrario, Donald Trump ha lanzado un mensaje de aliento y reconocimiento del papel del cristianismo en la historia de Estados Unidos. «Los católicos son una parte importante en la historia de Estados Unidos. Estados Unidos se ha fortalecido con católicos que trabajan duro. Desde Nueva York a California, la historia católica es realmente extraordinaria y grandiosa».
«Mi gobierno estará al lado de los católicos estadounidenses para promover los valores que todos compartimos como cristianos y estadounidenses», asegura el republicano
Además Trump valora el papel de los católicos en la vertebración del país. «Desde custodiar los derechos civiles a educar a millones de ninos, sirviendo a los pobres y ayudando a definir el movimiento provida, sacerdotes y laicos católicos en todo el país han hecho innumerables contribuciones al éxito de Estados Unidos y a la historia de Estados Unidos».
Uno de los mensajes de Donald Trump que ha calado en electorado católico ha sido el de reconocer que el establishment estadounidense les ha atacado con vehemencia. «Los políticos de Washington han sido hostiles a la Iglesia, han sido hostiles a los católicos, han sido hostiles a los miembros del catolicismo. Mi gobierno estará al lado de los católicos estadounidenses para promover los valores que todos compartimos como cristianos y estadounidenses. Que Dios os bendiga y Dios bendiga a los Estados Unidos de América».
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