Custodio Ballester, sacerdote español.
Custodio Ballester, sacerdote español.

«La maquinaria de lo políticamente correcto sigue su peligroso camino: acusan al padre Custodio Ballester de delito de odio por escribir un artículo sobre la peligrosidad del extremismo del islamismo violento», así comienza la campaña impulsada por HazteOir.org en defensa del padre Custodio Ballester dirigida al enviado especial de la Unión Europea para la promoción de la libertad religiosa.

En apenas unas horas, ya son cerca de 20.000 ciudadanos los que se han dirigido a Jan Figel para que interceda en el asunto y exija que se archive el caso porque «cada vez se le ve más el plumero al pensamiento único de esta izquierda, cuyo único propósito es elevar su ideología a la categoría de dogma oficial».

Algunas personas creen que La Sexta da información.

Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.

Suscríbete ahora

La fiscalía de delitos de odio de Málaga, pide 3 años de cárcel, 3.000 euros de multa, inhabilitación especial para el ejercicio del derecho de sufragio pasivo durante igual tiempo al de privación de libertad, inhabilitación especial para profesión u oficio educativos en el ámbito docente o de tiempo libre durante ocho años y costas para el padre Custodio Ballester, premiado en el año 2017 por la asociación, otro sacerdote y el editor del periódico digital en el que colaboran.

Según detalla HazteOir.org, esta es la frase del padre Custodio por la que quieren meterlo en la cárcel: “No nos engañemos, el Islam de hoy y de siempre, que es lo que estamos intentando cohonestar con el cristianismo, con una mano impulsa las obras de caridad, mientras arma la otra mano para aniquilar a todos aquellos que se niegan a reconocer a Alá, y a Mahoma como el último y definitivo profeta de Dios”.

La asociación anima a sumarse a la petición para «detener la apisonadora de lo políticamente correcto» porque, argumentan, «si no nos oponemos a esta injusticia, habremos abierto la puerta a futuros ataques a la libertad de expresión de solo una parte de los ciudadanos (los que la izquierda determina que no pueden expresarse con libertad)». 

Comentarios

Comentarios