En Argelia 50 mil cristianos tienen que vivir escondidos.

La organización de defensa de los derechos humanos Amnistía Internacional (AI) ha pedido al régimen argelino que libere de «inmediato y sin condiciones» a Suliman Buhafs, un cristiano converso argelino condenado a cinco años de prisión por supuestas injurias al Islam y el profeta Mahoma, según ha informado Efe.

AI reconoce que «la Constitución argelina, modificada en febrero de 2016, garantiza la libertad de religión, y hace del Islam la religión de Estado». Pero denuncia que «las disposiciones vagas que figuran en el Código Penal sobre las condiciones y normas de culto no musulmanes, aprobadas en 2006, han sido utilizadas para perseguir a las personas que ejercen pacíficamente su derecho a la libertad de expresión, religión y creencias».

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Buhafs, convertido al cristianismo hace más de dos décadas, fue detenido el pasado 31 de julio y sometido a juicio sin las garantías legales suficientes después de que compartiera en la red social «Facebook» caricaturas y otros materiales que se consideraron blasfemos e insultantes para el islam.

«Fue trasladado a la sede de la gendarmería del municipio de Buselam, en Setif, se le interrogó y su casa fue registrada» sin que en ningún momento pudiera pedir el amparo de un abogado, ni siquiera en el rápido juicio que enseguida siguió, ha recordado AI en un comunicado.

En apenas una semana, el tribunal le condenó a una pena de cinco años de prisión y una multa de 100.000 dinares (unos 10.000 euros) por insultos al Profeta y denigración de los principios y preceptos del Islam, en virtud del artículo 144 bis 2 del Código Penal de Argelia.

Buhafs ha estado varios días en huelga de hambre en la cárcel de Setif y no ha podido recibir visitas de su familia hasta el 17 de agosto, diez días después de ser condenado y más de dos semanas desde su detención.

Tras esa visita, la familia dijo estar muy preocupado por su salud, ya que ha perdido mucho peso y sufre de gota, lo que le obliga a llevar una dieta estricta que no está disponible en la cárcel.

La condena a Buhafs, que se convirtió al cristianismo hace dos décadas, coincidió a principios de agosto con la publicación de un informe del Departamento de Estado estadounidense sobre la libertad religiosa en 2015 que calificaba a Argelia como uno de los países más intransigentes del mundo.

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