Alrededor de 3.000 islamistas protagonizaron este lunes, y por segunda jornada consecutiva, una protesta frente al Parlamento paquistaní en la que reclaman que el radical Mumtaz Qadri, ejecutado hace un mes por el asesinato confeso de un político, sea reconocido como mártir por el Estado.
Los manifestantes han acampado, según recogen las informaciones de la agencia EFE, en la avenida de la Constitución en la llamada Zona Roja de Islamabad, un área de alta seguridad que alberga las instituciones del Gobierno y las embajadas.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEl agente, consultado por esta fuente, indicó que unos 70 islamistas han sido arrestados a lo largo del día y que otros miles continúan frente al Parlamento, lo que ha obstaculizado su funcionamiento y ha cortado en tráfico.
Los manifestantes reclaman que sus compañeros detenidos este domingo tras conmemorar el primer mes de la ejecución de Qadri sean liberados, que el ahorcado sea nombrado mártir por el Gobierno y que la celda que ocupó en la prisión de Adiala sea convertida en una biblioteca. Además, exigen que la cristiana Asia Bibi, condenada a muerte por blasfemia, sea ejecutada.
La presión contra Asia Bibi en las últimas semanas se ha incrementado. Los yihadistas reclaman al Gobierno pakistaní que ejecute ya la pena de muerte sobre la joven cristiana condenada por «blasfema al profeta».
En realidad incluso la matanza terrorista contra los cristianos que se cobró la vida de 72 personas el pasado Domingo de Resurrección en Lahore guarda relación con Asia Bibi. Aunque sea indirectamente. No hay que olvidar que el gobernador Taseer asesinado en 2011 por yihadistas defendió a Asia Bibi y condenó públicamente la ley antiblasfemia, por la que ella está en el corredor de la muerte.
MasLibres lanza una campaña a favor de Asia Bibi
Lo que vino después ya se conoce: los islamistas lanzaron una campaña contra él y su propio chófer le asesinó. La justicia paquistaní condenó a muerte al asesino, que fue ejecutado el 29 de febrero pasado. Por eso los islamistas quieren vengarse ahora por esta ejecución y llevan semanas pidiendo la ejecución inmediata de Asia Bibi, cuya familia vive en Lahore.
Y este Domingo de Pascua han provocado una matanza de cristianos en esa ciudad, mientras en la capital, Islamabad, a la misma hora en que el terrorista suicida segó la vida de 72 cristianos en Lahore, 25.000 seguidores del asesino del gobernador Taseer provocaban altercados exigiendo que el criminal sea declarado mártir y Asia Bibi ejecutada.
Por ello, MasLibres.org ha lanzado una campaña para incrementar la presión internacional en favor de Asia Bibi, es decir, para que el gobierno de Pakistán no ceda al chantaje sangriento de los fundamentalistas.