«¡Creyentes! ¡Combatid contra los infieles que tengáis cerca! ¡Qué os encuentren fuertes! ¡Sabed que Alá está con los que le temen!» (Sura 9:123).
Con este versículo, que forma parte de los 114 capítulos que componen el Corán, se insta a los musulmanes a llevar a cabo la yihad -o guerra santa- contra los pueblos infieles, entre ellos las «religiones del libro», es decir, judíos y cristianos.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.
Suscríbete ahoraPero éstos, antes de ser derrotados, deben ser invitados a convertirse. Si aceptan, formarán parte de la comunidad musulmana, la summa, y si lo rechazan, serán reos de muerte.
Expertos en el mundo árabe consultados por Actuall coinciden en que en el Corán se hace referencia en numerosas ocasiones a la violencia y a la muerte de infieles. Aunque advierten de que hay muchas contradicciones porque el propio Mahoma cambiaba de opinión, dependiendo del momento.
Portero: «Existe una contradicción entre una cultura globalizada y el islam»
El experto en Relaciones Internacionales y Geopolítica, Florentino Portero, sostiene que el aumento de violencia en el islam en los últimos años es «una consecuencia de la globalización en el que determinadas culturas del planeta están constituyendo una cultura universal, mientras que el Islam no va a poder mantener su propia cultura en este nuevo contexto«.
Y añade que «hay diferentes formas de vivir el islam. Llamamos islamistas a los que hacen una lectura directa y radical. Por el contrario, se llama técnicamente moderados, aunque no lo sean, a aquellos que piensan que el islam se puede adaptar a las circunstancias de cada época. Y que, por lo tanto, existe una contradicción entre una cultura globalizada y el islam«.
«se llama técnicamente moderados, aunque no lo sean, a aquellos que piensan que el islam se puede adaptar a las circunstancias de cada época»
Portero mantiene que dentro del Corán, «hay un componente religioso, político y jurídico y, en ese contexto, como toda cultura, tiene sus reglas». Y por consiguiente, «una violencia que se ve justificada en determinadas circunstancias».
Según detalla Florentino Portero, «la convivencia de musulmanes con occidentales es posible, ya que lo vemos todos los días». Sin embargo, aclara que «tampoco podemos hacer afirmaciones categóricas, porque al final todo se reduce a personas«.
Raad: “El Corán dice que no hacen nada malo matando»
Católico iraquí, de rito caldeo, Raad Salam Naaman es un experto en islamismo y doctor en Filología árabe. Asegura que «la historia del islam, desde su nacimiento, está atestada de violencia y guerra y se extendió por el ‘filo de su espada’, hasta el presente».
«Hay doscientos cincuenta y cinco versículos en el libro sagrado de los musulmanes que ordenan la violencia y la matanza, lo que no está permitido en cualquier otra religión, o en un mundo civilizado. Los musulmanes rezan cinco veces al día y repiten 17 veces una sura en la que critican a judíos y cristianos», añade Salam.
Se refiere a la sura 1:1-1 en la que se dice: «Alabado sea Dios, Señor del universo, el Compasivo, el Misericordioso, Soberano del día del Juicio. A Ti solo servimos y a Ti solo imploramos ayuda. Dirígenos por la vida recta, la vida de los que Tú has agraciado, no de los que han incurrido en la ira, ni de los extraviados».
Según explica Salam, «los intérpretes del Corán creen que los que han incurrido en la ira son los judíos y los extraviados son los cristianos» de tal forma que, a su juicio «si el musulmán desde muy joven reza todos los días 17 veces insultando a los judíos y cristianos y los llaman incrédulos, pues gracias a Dios que no todos los musulmanes intentan hacer algo contra los judíos y los cristianos«.
Los musulmanes nunca tienen sentimientos de culpa tras la matanza de infieles, porque el Corán les dice que no hacen nada malo.
La sura 8:12,17 dice: «Cuando vuestro Señor inspiró a los ángeles: Yo estoy con vosotros. ¡Confirmad, pues, a los que creen! Infundiré el terror en los corazones de quienes no crean. ¡Cortadles del cuello, pegadles en todos los dedos! No erais vosotros quienes les mataban, era Alá quien les mataba».
Para el doctor de filología árabe esto significa que «los musulmanes no tendrán ninguna culpa al matar a un infiel porque es el deseo de Alá y Alá solamente está utilizando sus manos para matar a los infieles. Los yihadistas se consideran en el Islam mártires, la gente más veraz y piadosa. Todos serán recibidos en el paraíso por los ángeles con saludos de paz y amor«.
En cuanto a la integración de los musulmanes en Occidente, Salam considera que es «es muy difícil, porque habitualmente los musulmanes viven en comunidades cerradas, juntos, practicando sus costumbres, tradiciones y su religión y no están dispuestos a realizar cambios. Al contrario, quieren imponer sus costumbres, tradiciones y su religión en las sociedades donde viven«.
Y concluye que “el islam está conquistando Europa, por el vientre de sus mujeres y la emigración, como predican sus dirigentes. El actual éxodo masivo de emigrantes a Europa no es trigo limpio, es el caballo de Troya”.
Fanjul: «Hay numerosas referencias violentas y exterminadoras»
Por su parte, el arabista español y miembro de la Real Academia de la Historia, Serafín Fanjul, explica que «en el Corán hay numerosas referencias violentas y exterminadoras». De hecho, apunta que “solamente en la sura 2 hay 39 alusiones violentas y 9 alusiones a exterminar al enemigo, es decir, a los no musulmanes”.
También aclara que «hay muchas contradicciones dentro del libro sagrado de los musulmanes porque las revelaciones dependían de las situaciones particulares que vivía Mahoma». Para intentar resolver estas discordancias, los sabios musulmanes pusieron en marcha «una ciencia del islam, llamada ‘El Abrogante y lo Abrogado’, en la que se dictamina que las revelaciones posteriores anulan a las anteriores».
De hecho, en el libro sagrado musulmán hay capítulos en los que se defiende la convivencia de musulmanes con otras religiones: «No cabe coacción en la religión. La buena dirección se distingue claramente del descarrío. Quien no cree en los taguts y cree en Alá, ese tal se ase del asidero más firme, de un asidero irrompible. Alá todo lo oye, todo lo sabe» (Sura 2:256 ).
Esta sura queda anulada por versículos posteriores como éstos: «Ciertamente, la Religión, para Alá, es el islam. Aquéllos a quienes se dio la Escritura no se opusieron unos a otros, por rebeldía mutua, sino después de haber recibido la Ciencia. Quien no cree en los signos de Alá,…Alá es rápido en ajustar cuentas» (Sura 3:19,20,85).
«Occidente está acostumbrado a que la religión se tome con un distanciamiento absoluto y se piensa que el mundo entero es así».
Para Fanjul, la integración de musulmanes en Europa es «inconciliable si un musulmán cree sinceramente en su fe, porque si no fuera así, estaría incumpliendo los ejes básicos de sus creencias».
«Cuando se baja de las musas al teatro es cuando se ve que es totalmente incompatible una cosa con otra», subraya, mientras que denuncia que «los políticos solo quieren soluciones maravillosas que no tengan coste y esto es imposible».
El arabista español considera que si hubiera más conocimiento del islam en el mundo occidental «no beneficiaría a los musulmanes» y apunta que el problema de Occidente es que «está acostumbrado a que la religión se tome con un distanciamiento absoluto y se piensa que el mundo entero es así».
Benjelloun: «Hay que diferenciar lo que hace una banda de sinvergüenzas con el islam»
No todos piensan que el islam es violento por naturaleza. El presidente de la Federación Española de Entidades Religiosas Islámicas (FEERI), Mounir Benjelloun, sostiene que «la base del Islam es la paz».
Benjelloun cree que no todo el mundo está preparado para interpretar el contenido del Corán y según señala a este periódico, «ni la guerra ni matar a infieles existe como concepto clave dentro del islam, sólo en casos de defensa propia. Y si fuera ese el caso, existen normas que prohíben a los musulmanes matar».
Para Benjelloun, «nadie puede matar por el islam, porque el islam no tiene portavoces» e insiste en que «ni siquiera existe algo llamado Estado Islámico, sino que son inventos políticos que sólo quieren perjudicar al islam».
Además, asegura que «quienes somos víctimas del IS, somos los propios musulmanes. Por ello, hay que diferenciar lo que hace una banda de sinvergüenzas de lo que son los principios del islam. Ocurre lo mismo cuando algún grupo en Colombia, que son católicos, comete actos terroristas. Pero nadie deduce de ahí que el cristianismo predique la violencia».
«También hay católicos en colombia que cometen atentados, pero nadie deduce de ahí que el cristianismo predique la violencia»
Respecto a los musulmanes que viven en Occidente, Benjelloun defiende que «es un hecho demostrable dentro de la historia que es posible esta integración. En Al-Andalus han convivido tres religiones (islam, cristianismo y judaísmo). Esto fue posible porque el islam no sólo no rechaza a los que no son musulmanes, sino que les respeta y les anima a convivir con ellos».