«Me gustaría decir algo a otras mujeres que se enfrentan a la presión por un aborto: si decides resistir y decir a la gente que necesitas ayuda hay mucha gente que está dispuesta a apoyar. Solo que es difícil cuando se mantiene un embarazo en secreto y no quieres que nadie lo sepa».
Este testimonio resume el espíritu del folleto El aborto no es la única opción -que está siendo utilizado por diversas entidades de apoyo a la muer embarazada en riesgo de aborto- y que la plataforma Derecho a Vivir ha editado en España gracias a un acuerdo para adaptar a nuestra realidad el texto This is not your only choice elaborado por Human Life Alliance.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraEl texto, en formato de bolsillo, pretende ofrecer «apoyo físico, emocional y material durante y después del embarazo», para apoyar a esas madres en crisis «a tomar decisiones positivas» para ellas y sus bebés.
En su contraportada, se resumen 8 consejos imprescindibles a tener en cuenta por toda mujer que se enfrenta a una situación de estrés personal, familiar y social a raíz de un embarazo inesperado o en un contexto de especial dificultad.
- Nadie puede forzarte o presionarte para abortar: es tu elección como madre.
- Tu bebé está creciendo y desarrollándose dentro de ti; pide ver tu ecografía.
- El aborto tiene muchas consecuencias físicas y emocionales.
- Hay organizaciones que proporcionan ayuda gratis y confidencialmente a mujeres embarazadas.
- Si ya has pagado para que te provoquen un aborto, pero no lo hay llevado a cabo, te tienen que devolver tu dinero.
- Si has tomado la primera dosis de la píldora abortiva, estás a tiempo de salvar a tu bebé. Llama al número 112 o acude al servicio de urgencias de un hospital.
- Pide ver y oír la ecografía. Tienes derecho a ello.
- Pide que te entreguen una foto y un informe de la ecografía. Tienes derecho a ello.
La contraportada del folleto El aborto no es la única opción, ofrece un consejo más que puede ser de utilidad aún cuando la madre está en el interior del negocio abortista, esperando turno: «Si estás sentada en un centro abortista, puedes cambiar de opinión e irte con tu bebé. No tengas miedo de levantarte e irte. Hay mucha gente que quiere ayudarte en este momento difícil. Puedes hacerlo».
«Me sentía una asesina que había matado a mi hijo»
Una buena parte del contenido del folleto se basa en testimonios de mujeres que se enfrentaron a la decisión sobre continuar con su embarazo y permitir vivir a sus hijos o terminar con sus vidas.
A pesar de que tanto la industria del aborto como sus partidarios mediáticos promueven esta práctica homicida como si de retirarse un quiste informe se tratara. Sin embargo, las mujeres que han abortado saben la realidad y algunas lo cuentan:
«Me sentía una asesina que había matado a mi hijo, estaba triste, se me caían las lágrimas, tenía una sensación de angustia, agonía, de no tener nada de paz, como si no me mereciera vivir por lo que había hecho», explica Alba.
«Me afectó emocionalmente. Era incapaz de establecer vínculos con las personas. Sufrí depresión. Fue la causa de años de comportamiento autodestructivo», comparte Rebeca.
Las mujeres que abortan tienen una tasa de suicidio seis veces mayor que entre las que mantienen su embarazo
Andrea describe la dantesca escena: «El médico comenzó a llevarse la bandeja con los restos. Caí de rodillas sin soltarle la muñeca y empecé a musitar: ‘eso es un bebé, es un bebé… pero ¿qué hice?'».
Estos y otros testimonios se acompañan de información científica sobre el aborto y sus principales métodos (aspiración, dilatación y legrado, dilatación y evacuación, inducción y químico) así como sobre sus posibles consecuencia físicas (perforación del útero,hemorragia, desgarro cervical, etc.) o mentales y emocionales que se traducen en que las mujeres que abortan tienen una tasa de suicidio seis veces mayor que entre las que mantienen su embarazo y 10 veces mayor que entre las chicas adolescentes.
Pese a ello y al conocido como síndrome postaborto, con efectos similares al estrés postraumático, se da un mensaje de positivo, pues con ayuda, «¡hay esperanza y curación después de un aborto!», enfatizan.
Porque como explica otro de los testimonios recogidos en esta guía de ayuda a la mujer embarazada en riesgo de aborto: «No puedo prometerte un camino fácil. sólo puedo prometerte que el miedo y la angustia pasarán y que hay gente que te ayudará en este tiempo de pruebas. Un día mirarás atrás, antes del nacimiento de tu hijo y sabrás que hiciste lo correcto».
Se pueden pedir ejemplares a través del enlace: https://derechoavivir.org/el-aborto-no-es-la-unica-opcion/