Barack Obama (izquierda) y Cecile Richards, presidenta de Planned Parenthood ( derecha)
Barack Obama (izquierda) y Cecile Richards, presidenta de Planned Parenthood ( derecha)

La muerte de Antonin Scalia supuso un duro varapalo para el movimiento conservador y provida de Estados Unidos. El juez de la Corte Suprema era una auténtica institución en el país, pero sobre todo era un firme defensor de la vida, faceta que mostraba en su vida pública en todo momento.

En cuanto Scalia falleció, rápidamente Barack Obama comenzó a maniobrar para sustituir su asiento en el Supremo de Estados Unidos por un juez progresista y proaborto. Este movimiento del presidente ha provocado grandes críticas pues tanto la oposición republicana como numerosos grupos de la sociedad argumentan que dicho nombramiento le debe corresponder al nuevo Gobierno y no a Obama, que está ya en tiempo de descuento.

Algunas personas creen que La Sexta da información.

Suscríbete a Actuall y así no caerás nunca en la tentación.

Suscríbete ahora

Sin embargo, el presidente estadounidense ha hecho caso omiso a las críticas y ha propuesto un candidato para el puesto de Scalia que confirma los peores augurios. Se trata del juez progresista Merrick Garland, hasta ahora juez federal de apelaciones en Washington DC. Y además es un magistrado proaborto, tal y como pretendía Obama.

Merrick Garland, juez propuesto por Obama para ocupar el cargo de Scalia en la Corte Suprema
Merrick Garland, juez propuesto por Obama para ocupar el cargo de Scalia en la Corte Suprema

Pero lo más curioso es que tras conocerse el nombre de Garland para el puesto hasta ahora ocupado por el provida Scalia se ha captado la imagen de la presidenta de la multinacional abortista Planned Parenthood, Cecile Richards, entrando en el ala oeste de la Casa Blanca.

 

La compañía que vendía órganos y tejidos de bebés abortados ha encontrado siempre una férrea defensa por parte de Obama y también de la precandidata Hillary Clinton. Y la empresa abortista les ha correspondido con millonarias donaciones.

La imagen de Richards en la Casa Blanca ha desatado todo tipo de especulaciones en Estados Unidos, precisamente en un momento en el que la industria abortista está en retirada debido a las legislaciones y sentencias judiciales que están dando la razón a los provida.

De este modo, la llegada de Garland a la Corte Suprema supondría un balón de oxígeno para los abortistas, especialmente para Planned Parenthood, actualmente en el punto de mira del Senado y el Congreso, que han iniciado investigaciones sobre esta clínica.

Esta instantánea ha llevado a los grupos provida a pedir con más ahínco, si cabe, que se frene el nombramiento de Garland para la Corte Suprema, juez que llegó a decir que la sentencia Roe vs Wade que abrió la puerta al aborto en Estados Unidos ha sido “el mejor regalo para el país”.

Comentarios

Comentarios