Chris Bell estaba trabajando en la plaza neoyorquina en 1970 cuando se dio cuenta que numerosas madres embarazadas ingresaban en una especie de refugio que no sólo cuidaba de ellas, sino también de sus bebés. Decidió en ese momento hacer algo para ayudar a todas estas personas.
Así con la ayuda del padre Benedict Groeschel, miembro de los Frailes Franciscanos de la Renovación y su director espiritual en ese momento, Bell fundó Good Counsel, una red de casas provida para mujeres embarazadas y sus hijos.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraActualmente, Good Counsel opera siete casas, cuatro en el estado de Nueva York, una en Nueva Jersey, una en Alabama y una en Connecticut, y trabaja con otras casas en todo el país. Además, pretende seguir expandiéndose.
Cualquier mujer embarazada puede vivir, de forma gratuita, en las casas. Allí se les brindarán la oportunidad de volver a la escuela y encontrar trabajo. Incluso recibirán ayuda legal de manos de abogados. Asimismo, Good Counsel también gestionar adopciones. «La mayoría de las casas son pequeñas y están limitadas en lo que pueden hacer, pero podemos ayudar a encontrar un lugar para cualquier mujer embarazada en el país«, asegura Chris, según informa InfoCatólica.
Las mujeres a las que se les dice que su hijo tendrán defectos genéticos también pueden beneficiarse de estas casas provida. «No sé por qué la única respuesta que tienen tantos doctores es decirle a la madre que se deshaga de sus hijos sí parece que tendrá defectos genéticos», denuncia el fundador de Good Counsel.
Bell recuerda la historia de una madre que ya tenía un hijo de tres años cuando acudió a Good Counsel. Cuando le dijo al padre que estaba embarazada, la pegó en el estómago y ella le dejó. En sus primeros meses, obtuvo un certificado de salud en el hogar y, después de tener el bebé y quedarse con él durante unos meses, encontró un trabajo.»Cuando pienso en dónde estaba cuando vino a nosotros y dónde estaba cuando se fue, fue un cambio total«, señala orgullosa.
El fundador de estas casas provida cree que la cobertura de los medios es una de las razones de la falta de conciencia sobre la maternidad. «Creo que los medios tienen un fuerte prejuicio contra todo lo que sea antiaborto», detalló.
A pesar de ello, su único objetivo es seguir trabajando en este proyecto. «La pregunta que hago es: ¿no hay suficiente amor en el mundo para otro bebé? Donde hay amor, hay vida, y donde hay vida, hay esperanza. Podemos cambiar las cosas observando una vida a la vez y una familia a la vez», concluyó.
