Este sábado está previsto que reanude su actividad la Amblancia Vida, el servicio de atención a la mujer embarazada en riesgo de aborto que ofrece la realización de ecografías gratuitas a las puertas del negocio abortista Dator de Madrid.
La iniciativa, impulsada por la plataforma Derecho a Vivir, ha consultado a la Comunidad de Madrid si debía cumplir alguna norma específica referida a la pandemia de coronavirus para poder reanudar su actividad, obteniendo por respuesta telefónica la indicación de seguir normas de «sentido común», según fuentes de la plataforma consultadas por Actuall.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraDerecho a Vivir ha decidido que la Ambulancia Vida vuelva a prestar servicio con todas las garantías sanitarias respecto a la pandemia que proteja tanto a los médicos y conductores voluntarios, como a las mujeres embarazadas:
• Todas las personas que entren en la ambulancia deberán hacerlo con «calzas» para los pies (como las de los hospitales) que al salir serán desechadas.
• Deberán utilizar mascarilla. Si las personas no tienen las suyas, se les proporcionará una.
• En la Ambulancia hay guantes para que el médico pueda hacer las ecografías con más seguridad.
• Los médicos tendrán a su disposición batas desechables como las de los hospitales.
• Se ha sustituido la funda que proteje la camilla por un rollo de papel que la cubrirá. El trozo que se emplee en cada ocasión será desechado.
• Después de la atención a la madre, el conductor de la Ambulancia Vida pulverizará con un producto higienizante a base de dióxido de cloro todas las superficies susceptibles de poder ser fuente de contagio y las secará con una balleta.
• Asímismo, la Ambulancia cuenta con gel hidroalcohólico y papel desechable para las ecografías.
• La Ambulancia será barrida y fregada antes de cada servicio los sábados por la mañana.
La Ambulancia Vida es un recurso que la plataforma Derecho a Vivir pone a disposición de los grupos de rescatadores provida y que cumple con todas las autorizaciones y requisitos obligatorios establecidos por la consejería de Sanidad de la Comunidad de Madrid.
Los grupos de la oposición en la Asamblea de Madrid han reiterado iniciativas para desacreditar este servicio que han resultado infructuosas, dado que más allá de los requisitos legales, se mantiene si recibir un euro de subvenciones públicas.
