
El pasado 28 de septiembre se publicó en el BOE la concesión de utilidad pública a la Asociación Derecho a Morir Dignamente que preside el doctor Luis Montes, más conocido como el doctor Muerte.
En medio del debate por la Ley de Muerte Digna que Ciudadanos intenta legislar en España, el Gobierno popular de Mariano Rajoy ha concedido esta atribución a una asociación que lucha por implantar la eutanasia en el país, al igual que la que existe en Bélgica o Holanda, donde más de 6.000 personas decidieron poner fin a sus vidas, de las cuales más de 400 fueron sin permiso.
Algunas personas creen que La Sexta da información.
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Suscríbete ahoraLa llegada de una ley por la llamada muerte digna en España es solo cuestión de tiempo, pues ya hay varias comunidades autónomas que han aprobado normas similares (Andalucía, Aragón, Navarra, Galicia, Baleares, Canarias).
Por el momento la eutanasia no tiene visos que despenalizarse en España ya que la propuesta de Unidos Podemos no fue admitida en el Congreso de los Diputados
Según su propia página web, la finalidad de la asociación que preside Montes es: «promover el derecho de toda persona a disponer con libertad de su cuerpo y de su vida, y a elegir libre y legalmente el momento y los medios para finalizarla, y defender el derecho de los enfermos terminales e irreversibles a, llegado el momento, morir pacíficamente y sin sufrimientos, si éste es su deseo expreso».
Por el momento, la eutanasia no tiene visos que despenalizarse en España ya que la propuesta de Unidos Podemos no fue admitida en el Congreso de los Diputados en detrimento de la propuesta de Ciudadanos, a la que Montes definió en una entrevista como «eutanasia indirecta (sedación paliativa) o pasiva (retirar los tratamientos)».
¿Quién es Luis Montes?
Al doctor Montes se le impuso el mote de ‘doctor Muerte’ en la prensa después de que fuese acusado junto con otros 15 médicos de ‘mala praxis’ por la muerte de 200 pacientes en el hospital Severo Ochoa por dosis «excesivas de fármacos».
Después de pasar hasta dos años por los juzgados de Madrid y de levantar multitud de polémicas, la Audiencia Provincial de Madrid –con la actual alcaldesa de Madrid, Manuela Carmena, entre sus componentes– decidió absolver a los acusados de ‘mala praxis’ y el caso queda sobreseído.
Desde entonces el nombre de Luis Montes sale de vez en cuando en la prensa, sobre todo cuando habla de la eutanasia, de la que es un firme defensor.
En una entrevista concedida al diario 20 minutos, el doctor Montes aseguraba que la obligación de un médico no es preservar la vida:
«Lo que hace la medicina es procurar que los años que vivas lo hagas con la mayor calidad posible, pero luchar contra la muerte es un imposible», afirmaba el doctor.
Montes: «Lo que no permiten que otro decida sobre su propia muerte, son los primeros que se suicidan»
Dentro de su argumentario para promover la eutanasia, Montes no duda en comparar la eutanasia con el aborto, y esgrime que solo los ricos pueden morir dignamente en Suiza previo pago de 6.000 euros (en caso de enfermedad grave), como ocurría -argumenta- con las jóvenes que iban a Londres a abortar.
Pero no se queda ahí su equiparación, ya que insinúa que son aquellos que pueden abortar, suicidarse o divorciarse los que intentan prohibir a los demás hacerlo: «Los que piensan que abortar es eliminar una vida, permiten abortar a sus hijas»
Y añade: «Los que creen que el matrimonio es un sacramento indisoluble, se divorcian si se enamoran de su secretaria. Los que no permiten que otro decida sobre su propia muerte, son los primeros que se suicidan, pero acompañados y con buenos métodos».
Para terminar acusando al ‘nacionalcatolicismo’ de la época de Francisco Franco de impedir la eutanasia hoy en España, ya que no se ha reformado la ley desde entonces excepto por una modificación que hizo el PSOE del artículo 143 del Código Penal.
«¿Por qué no una muerte a petición?» ha defendido Montes en alguna ocasión. Alegando que la vida «en algunos momentos se puede convertir en un mal indeseable y se trata de que tengas derecho a apearte».
Ante estas declaraciones, la portavoz de derecho a Vivir, Gádor Joya, puntualizó en su momento: «ayudar a ‘morir mejor’ no significa ni debe confundirse en ningún caso con ‘morir antes’.»
Y añadió: «Con acelerar la muerte antes de su fin natural no resolvemos ningún problema. De lo que se trata es de mejorar lo que favorece las condiciones al paciente, en las unidades de tratamiento del dolor y en los cuidados paliativos, pero no en procurar la muerte antes de tiempo«.
Dicho de otro modo, «una muerte digna es humanizadora cuando respeta el proceso natural del final de la vida, lo rodea de afecto personal y provee los mejores cuidados. Tan negativo es no dejar morir a la gente cuando le toca, como provocar su muerte antes de tiempo«, recuerda la doctora Joya.
Una asociación de utilidad pública, con condenados
La última polémica de la asociación del doctor Montes salió a la luz cuando tres de sus colaboradores fueron acusados de practicar la eutanasia a dos personas en Avilés y Cádiz en 2016.
Aunque ninguno de ellos pisará la cárcel por aceptar los hechos y reducirse la calificación de los delitos a menores.
Estas tres personas son dos médicos y una voluntaria que adquirieron y distribuyeron fármacos anestésicos de forma clandestina, los cuales causaron la muerte de un paciente.
El otro enfermo salvó la vida gracias a que la policía intervino e impidió la entrega de medicamentos.